La nueva ley del aborto impulsada por Irene Montero y el Ministerio de Igualdad ha vuelto a situar este asunto en el mapa político. Se trata de una cuestión controvertida que suele cambiar cuando cambia el color del Gobierno. En su momento, el Partido Popular recurrió la ley que regulaba el aborto ante el Tribunal Constitucional, luego, Rajoy la modificó.
El Gobierno actual ha decidido ampliarla y establecer que las menores embarazadas no necesiten el permiso paterno para llevar acabo la interrupción voluntaria del embarazo. Isabel Díaz Ayuso sorprendió la semana pasada adoptando una posición que no parece ser la mayoritaria en el PP. La presidenta de la Comunidad de Madrid mostró su perfil más liberal y afirmó que una mujer tiene que hacer con su cuerpo lo que vea conveninente, sin que la edad en este caso tuviera relevancia.
Este miércoles, en una entrevista en Onda Cero, le ha tocado posicionarse a Juanma Moreno, presidente de la Junta de Andalucía. Moreno ha sido menos claro que su compañera de filas y ha dado un rodeo sin terminar de responder a la pregunta sobre su posición acerca de la nueva ley.
Moreno ha subrayado que el aborto "suele ser" para quien se somete a él "un drama con secuelas desde el punto de vista sanitario y psicológico durante muchos años", y, frente a ello, "la estrategia de Andalucía es de prevención, de evitar que una niña tenga que llegar a ese drama, esa situación compleja de tener que llegar a un aborto". Durante su larga respuesta he hecho hincapié en la "información" de la afectada y ha señalado que apuesta por mayor "educación sexual" mandando un recado a Vox, anterior socio de Gobierno, "algunos condenan cuando se da información sexual a los adolescentes".
El presidente de la Junta ha señalado que "hay países que han hecho políticas de información y educación muy interesantes que han conseguido reducir la tasa de abortos a niveles mínimos, simplemente con información", pero también ha hecho un alegato a favor del conocimiento de las familias, "en ese ámbito de decisión tan duro y complejo, necesita la protección, el amparo, el cariño de sus padres". De forma que "el conocimiento" de los progenitores le parece "fundamental para tener ese colchón afectivo que te pueda ayudar a una decisión tan difícil como debe de ser" la de abortar. A pesar de sus palabras, no ha aclarado si se refería al consentimiento.
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