La ciudad deportiva del Rosal ha vivido esta tarde una escena inusual en el fútbol. Estamos acostumbrados a que los partidos se puedan aplazar por lluvias torrenciales e, incluso, por grandes rachas de viento. Sin embargo, este sábado el Cádiz Mirandilla y el San Roque de Lepe han conocido un motivo más.
El partido de la trigésima jornada entre el club gaditano y el onubense se ha tenido que detener en el minuto 40 por una plaga de mosquitos. Es decir, la cantidad de mosquitos que había en el terreno de juego ha impedido que el encuentro pudiera continuar.
Durante algunos minutos se ha esperado e, incluso, probado con el riego para ver si la nube de mosquitos que sobrevolaba el campo y molestaba a los jugadores de ambos equipos desaparecía.
Sin embargo, después de esperar unos diez minutos, el colegiado del encuentro se ha visto obligado a mandar a los dos equipos a los vestuarios para que esperasen allí una posible solución. El partido que enfrenta al decimotercer clasificado y al séptimo clasificado del grupo 4 de 2RFEF sigue sin poder disputarse. Los colegiados han decidido que el partido se reanude a las 18:20.