Si las probabilidades de éxito de la confluencia andaluza de Podemos, IU, Equo, Izquierda Andalucista y Primavera Andaluza se midieran en presencia de medios de comunicación a su acto de presentación, Susana Díaz y el PSOE andaluz deberían empezar a preocuparse seriamente.
Un enjambre de cámaras de televisión, andaluzas y españolas, esperaban este viernes de julio sevillano, de brisa de poniente y temperaturas primaverales, la llegada de los líderes de todas las organizaciones que han parido Adelante Andalucía, la marca que, seguida del nombre de los distintos agentes de cambio integrados en la misma, pretende ser la alternativa a un PSOE-A “caduco e incapaz que saca pecho por poner televisiones gratuitas en los hospitales públicos mientras las listas de espera son más largas que nunca”, según ha afirmado Teresa Rodríguez en el sevillano Palacio de la Buhaira, un espacio abierto que en sí es ya una confluencia arquitectónica, de pasado andalusí con una basílica cristiana inacabada del arquitecto regionalista andaluz Aníbal González.
El simbolismo no es casual. Como tampoco lo es la identidad visual de la marca, una doble letra A en verde Andalucía, atravesada por una línea irregular que para Antonio Maíllo, coordinador andaluz de IU, “abraza como nos hemos abrazado todas las organizaciones de Adelante Andalucía con una ilusión que nos desborda”.
“Convocamos a la esperanza, estamos preparados y tenemos proyecto”, ha dicho Teresa Rodríguez mientras desde Madrid observan sus movimientos sin que puedan hacer demasiado, tras la aplastante victoria que obtuvo la gaditana en las primarias andaluzas de la formación morada que bloquean la capacidad de movimiento de la dirección estatal.
La Andalucía nueva que ya existe
“La autonomía no se mendiga, se ejerce”, le ha espetado Rodríguez a la dirección nacional de Podemos, que sigue sin estar del todo de acuerdo con la marca elegida que prioriza lo programático a la identidad partidaria de las partes. El último intento de Pablo Echenique por imponer sus tesis a la dirección andaluza se produjo la noche del jueves, según fuentes de Podemos Andalucía, para que el nombre de la formación morada tenga más protagonismo en la marca Adelante Andalucía.
No obstante, Teresa Rodríguez le ha dedicado poco tiempo a la polémica con la dirección estatal. En su mente, un objetivo: “Salimos a buscar la Andalucía nueva que ya está. No nos merecemos encabezar los listados más negros porque tenemos la autoestima suficiente para pensarnos mejores. Merecemos ser mejores”, ha dicho Teresa Rodríguez en actitud presidenciable, aunque el candidato o candidata a la Presidencia de la Junta de Andalucía saldrá de un proceso conjunto de primarias para lo que primero tendrán que elaborar el reglamento.
Ganarle al susanismo, “una forma de socialismo vinculado a la corrupción y a las redes clientelares”, es el objetivo de Adelante Andalucía, para lo que quieren llegar al votante socialista que podría votar a Pedro Sánchez en las elecciones generales pero que le cuesta depositar su voto a Susana Díaz. “Ponemos los aparatos de las organizaciones a disposición de Andalucía”, ha remarcado Teresa Rodríguez, quien, con casi toda probabilidad, será la candidata de Adelante Andalucía en las elecciones autonómicas que aún no están convocadas pero que todo hace sospechar que se celebrarán en otoño tras la previsible disolución del Parlamento por la presidenta andaluza a la vuelta de las vacaciones.
Miembros de Adelante Andalucía detrás de la identidad visual de la marca electoral. FOTO: R.S.delan
Día histórico
Pilar Távora, portavoz de Izquierda Andalucista, facción progresista del extinto Partido Andalucista, ha animado a unirse a Adelante Andalucía a todos “los que quieran un proyecto de futuro” para nuestra tierra. “No nos van a detener más, como detuvieron a Blas Infante un 2 de agosto para matarlo días después”, ha recordado la andalucista, visiblemente emocionada “ante un día histórico”.
También con acento andalucista, la portavoz de Primavera Andaluza, Pilar González, la que fuera la última portavoz del PA en el Parlamento de Andalucía, ha llamado a la “esperanza” y declarado su “alegría” porque “adelante es adverbio de lugar y de tiempo”. La formación ecologista Equo, representada por el cordobés Pepe Larios, ha manifestado que “hay que dejar de ser el espacio de la queja para construir soberanía”, entre las que prioriza la energética.
Fuera de cámara, miembros de Adelante Andalucía admiten que “no somos conscientes del potencial de lo que estamos construyendo” y sueñan con ganarle al PSOE y evitar que la alternativa, a lo que ellos llaman “susanismo”, venga del lado de las derechas de PP y Ciudadanos. Un miembro de Podemos, preguntado por los pronósticos que tienen, lo deja claro: “Ganar, ganar y ganar, pero si no ganamos y quedamos segundos con unos 30 escaños, habremos dado un paso de gigantes para ganar en cuatro años”. El objetivo es complicado, pero por ilusión no será.
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