Las sociedades de cazadores de Andalucía han tomado una decisión "sin precedentes", según el presidente de la Federación Andaluza de Caza, José María Mancheño. No cazarán perdices rojas pese a que el domingo dio comienzo el periodo hábil de caza para esta especie tras comprobar que las poblaciones han descendido. Su declive ha sido provocado por la sequía y numerosos factores que, desde hace más de una década, están perjudicándole.
Según ha detallado esta federación, sociedades de cazadores como las de Almargen, Villanueva del Rosario, El Saucejo, Los Corrales, Osuna, La Higuera, Alcalá La Real, Arjona, Torres, Arjonilla, Estación de Linares-Baeza, Sotogordo Loja, Tocón, Ventorros de la Laguna, Huétor Tájar y Colomera, entre otras muchas, han optado porque sus socios no cacen la perdiz esta temporada en ninguna modalidad para así garantizar su conservación y la recuperación de sus poblaciones.
Otras sociedades de otras provincias aplicarán fuertes restricciones en la caza de esta especie en un año especialmente negativo para la cría. Por ejemblo, entre las medidas que se llevarán a cabo se encuentran limitar los días hábiles de caza en sus acotados, reducir los cupos al mínimo, no permitir determinadas modalidades, retrasar el inicio del periodo hábil hasta que llueva o incluso suspenderlo si esto no ocurre.
"Está demostrado que el declive de las poblaciones de perdiz roja debido a distintas acciones que inciden directamente en la alteración y modificación de su hábitat natural, en el cual encuentra alimento, refugio y áreas de reproducción y cría", ha dicho el vicepresidente y coordinador del Servicio Técnico de la Federación andaluza de Caza, José Antonio López.
"La acuciante sequía acumulada esta temporada, unida a otros factores que llevamos años alertando como la alta presión predatoria, alteraciones del territorio, empleo de ciertas prácticas agrícolas agresivas para el medio rural, entre otros, están afectando a las poblaciones de esta especie que se encuentra en una situación, cuando menos, preocupante", ha remarcado el coordinador, que añade que "esto motiva que nuestras sociedades implementen acciones para revertir esta situación y, en la medida de sus posibilidades, lleven a cabo medidas que fomenten la recuperación de esta especie".
La Federación Andaluza de Caza cuenta con una hoja de ruta estratégica con medidas tangibles y avances legales para frenar el declive de la fauna menor, tanto cinegética como no cinegética, denominada Plan de Recuperación de la Caza Menor en Andalucía (Precam), que fue presentado a la Junta de Andalucía tras su elaboración en mayo de 2022.
Los cazadores andaluces siguen apostando por la autogestión para conservar la perdiz roja, una especie emblemática del medio natural andaluz que constituye un recurso fundamental para la actividad cinegética. Mientras tanto, están a la espera de que la Junta acometa esta batería de medidas propuestas en el Precam, que en muchos casos corresponden a "demandas históricas" del sector.
El presidente de la Federación Andaluza de Caza, José María Mancheño, ha aseverado que "después de estar todo el verano aportando, con sus propios recursos y sin ayuda de nadie, agua y alimentación suplementaria a sus cotos, ahora muchas sociedades de cazadores dan un paso más y deciden que no cazarán la perdiz o limitarán su aprovechamiento respecto al número de cupos, períodos o modalidades".
"Se trata de un ejercicio de responsabilidad sin precedentes: pese a que no cazarán la perdiz esta temporada o limitarán su aprovechamiento, todas estas sociedades de cazadores asumirán con sus propios recursos el mantenimiento económico de los cotos y, a la vez, seguirán ejerciendo labores de gestión cinegética que, como puede comprobarse, son vitales para la conservación", ha sostenido.