La comitiva andaluza presente en la Cumbre del Clima de la ONU, que se celebra estos días en Bakú, Azerbaiyán, ha acudido con una cierta agenda de presentaciones y reuniones de la que se van conociendo más detalles. Juanma Moreno acude como vicepresidente del Comité de las Regiones de la Unión Europea, pero también como líder andaluz, y prueba de ello es que acude con varios de sus consejeros.
Entre los anuncios realizados por Moreno, ha adelantado que el Consejo de Gobierno de la próxima semana aprobará la Estrategia Andaluza de Aguas Regeneradas. El objetivo es que Andalucía se convierta en la primera comunidad en volumen de agua depurada y reciclada.
En la habitual comparativa respecto a 2019 (año en que el PP llegó al poder en Andalucía", Moreno ha explicado que entonces se regeneraban 17 hectómetros cúbicos al año, y que actualmente esta cifra está en 70. Pero para 2027, dentro de tres años, quiere que sean 180 hectómetros cúbicos. De ellos, 140 procedentes de las cuencas que gestiona directamente la Junta, y otros 40 procedentes del Guadalquivir, de gestión estatal. En total, serán 400 millones de euros.
A este respecto, ha concretado que la Estrategia Andaluza de Aguas Regeneradas contempla ya varias actuaciones como la adecuación de El Bobar, la ampliación de El Toyo, la ampliación de Vera, la EDAR de Mojácar, de Huércal Overa y de Cuevas de Almanzora, en Almería; la segunda fase de la EDAR del Guadalhorce, en Málaga; en Algeciras, La Línea y San Roque, en Cádiz; y la EDAR de Huelva.
Así, ha insistido en que la actuación prevista en el Guadalhorce, en Málaga, es una de las más destacadas y ha puntualizado que la ampliación a su segunda fase del terciario supondrá construir una estación de regeneración de aguas tratadas que permitiría disponer de 15Hm3 de agua regenerada adicionales para uso ambiental, agrícola y para otros usos como el abastecimiento humano. De este modo, ha subrayado que la búsqueda de esos recursos adicionales no convencionales se completa con la desalación, una de las grandes apuestas de Andalucía en la pasada edición de la COP.
En relación con este asunto, ha añadido que en la actualidad la comunidad andaluza cuenta con 103Hm3 de agua desalada disponibles gracias a las obras en las desaladoras de Carboneras, Mar de Alborán, Almería y Campo de Dalias I. "El objetivo dentro de esta misma Estrategia andaluza es llegar a desalar cada año 160 Hm3 en el mismo horizonte de 2027 y para lograrlo, ya se están ejecutando o están contempladas actuaciones en Bajo Almanzora I, Cuevas de Almanzora y la desaladora de Marbella, entre otras".
El presidente andaluz ha indicado que Andalucía es una región especialmente sensible a las consecuencias de la crisis climática y que está demostrando una clara singularidad hídrica que exige una enorme dosis de audacia en la gestión de los recursos, porque "el régimen de precipitaciones es cada vez más desordenado, escaso e impredecible". "En Andalucía tenemos clara la apuesta por los recursos no convencionales: la producción de agua desalada y de agua regenerada. El objetivo es depender un poco menos de esperar a que el agua nos caiga del cielo".