Nuevos regadíos intensivos en la Sierra de Cádiz: conceden agua suficiente para abastecer a 5.000 personas

Ecologistas en Acción recuerda que la Sierra de Grazalema es la principal fuente de agua de la cuenca del Guadalete, que abastece a cerca de un millón de personas

Olivar intensivo en Villamartín, en la Sierra de Cádiz, en una imagen reciente.

Inversiones Ónix, S.A. ha conseguido la concesión de 372.396 metros cúbicos de agua al año para poner en regadío 111,5 hectáreas en el término municipal de Villamartín.

Por eso, Ecologistas en Acción-Sierra de Cádiz ha formalizado ante la delegación territorial de la Consejería de Agricultura, Pesca, Aguas y Desarrollo Rural su oposición a la concesión de agua para regadíos en este pueblo de la Sierra de Cádiz.

"Esta solicitud de concesión de aguas es incompatible con la garantía en el futuro del suministro de agua potable de las poblaciones que se abastecen de la cuenca del Guadalete y que tiene en el acuífero de la Sierra de Grazalema su principal reservorio de agua de calidad", critican desde Ecologistas, que recuerda que la Sierra de Grazalema es la principal fuente de agua de la cuenca del Guadalete, que abastece a cerca de un millón de personas.

La empresa  Inversiones Ónix S.A. ha solicitado la extracción de 372.396,06 m3/año de agua del acuífero de la Sierra de Grazalema-Prado del Rey para regar un olivar intensivo, maíz y remolacha azucarera.

La entidad ecologista critica que, con esta medida, se propone poner en regadío más de 111,5 nuevas hectáreas de cultivos que "generan muy poco empleo", y que, en el caso del olivar, supone una competencia desleal con el olivar tradicional de montaña, por producir más utilizando agua pública y no necesitar prácticamente de mano de obra, "por lo que el interés social de esta trasformación de terrenos en regadío es nulo".

El volumen de agua destinado a este fin podría abastecer a una población de 5.000 personas. Las demandas actuales para regadíos en la cuenca del Guadalete ascienden a 206,65 hm3/año, más del doble que las demandas para abastecimiento urbano, que asciende a 98,34 hm3/año. "Y se pretende seguir otorgando concesiones para ampliar más regadíos", lamentan desde Ecologistas.

El Plan Hidrológico del Guadalete, aprobado por Real Decreto 689/2023, regula los criterios de prioridad y compatibilidad de usos, determinando que la primera prioridad es el abastecimiento de la población. Pero en contra de estas determinaciones, la prioridad hasta ahora de la Junta de Andalucía ha sido satisfacer las insaciables demandas agrícolas con un constante crecimiento de los regadíos, cuando los recursos son finitos y los periodos de sequía se están agravando con el cambio climático.

"Esta irresponsabilidad ha llevado a tensionar el sistema hasta el límite de tenerse que imponer restricciones cuando se suceden sólo dos o tres años con precipitaciones por debajo de la media, sin capacidad alguna de responder con las reservas adecuadas a estos fenómenos climáticos cada vez más acentuados", rematan los ecologistas.