La playa de El Lentiscal de Bolonia no presenta las condiciones necesarias para albergar toda la basura del número de visitantes que suele acudir a la zona en verano. Son pocos los contenedores que hay en la playa y el funcionamiento del servicio de recogida de basuras deja mucho que desear.
Así lo ha denunciado Quique Bolsitas, el profesor sevillano y activista ecológico que recoge basura por toda España para luchar contra la basuraleza. "Hay poquísimos contenedores para el volumen de coches y personas que acude a la playa. La recogida de basura, además, se hace al día siguiente, a la hora que pille. Desde la siete de la tarde, la basura está volando".
Con los contenedores llenos, mucha basura queda fuera de los mismos y los plásticos empiezan a volar por la arena y acaban en el agua, con el peligro que esto supone para las especies marinas. "Esto es un parque natural y los pescadores nos cuentan que han visto aquí hasta a jabalíes alrededor de la basura", cuenta Quique.
"Esto en Rota, por ejemplo, no pasa. Primero porque hay más contenedores y, segundo, porque hay gente que a las dos o a las tres, o a las siete de la tarde, va sacando la basura y poniendo bolsas nuevas. Hay una persona responsable que va dando vueltas y reponiendo las bolsas. Aquí en Tarifa no ocurre lo mismo y es una vergüenza que esto esté ocurriendo en el año 2022, en el siglo XXI. Esto no cuesta mucho, pero hay unos incompetentes que no hacen las cosas bien. Que se pongan más contenedores y a alguien recogiendo basuras. Estamos hablando de la mejor playa de España y una de las mejores de Europa", concluye este activista sevillano.