Las once empresas que integran la Asociación Profesional de Bodegas de Sanlúcar se reunirán en asamblea hoy jueves 29 a la una de la tarde para, nada más concluir el encuentro, dar una respuesta a los sindicatos UGT y Comisiones Obreras, que les han trasladado la propuesta final formulada por los mediadores del Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales en Andalucía (Sercla).
A la reunión celebrada en Sanlúcar asistieron anoche, además de los dirigentes sindicales Antonio Montoro y Manuel Romero, cinco representantes de la Asociación Profesional de Bodegas de Sanlúcar entre ellos su presidente, Fermín Hidalgo, el vicepresidente Víctor Vélez y el secretario y asesor jurídico, el letrado José Gómez.
Mientras los movimientos internos se suceden en Fedejerez, que podrían aceptar en esta mañana la propuesta del Sercla que ayer rechazaron, ante todo por el riesgo de fractura del sector de la vid. Por otra parte bodegas Estévez podría sumarse a un eventual acuerdo entre los sindicatos y la Asociación Profesional de Bodegas de Sanlúcar.
El ambiente de la reunión ha sido muy positivo a juicio de las partes. “Ha sido muy cordial, un ambiente razonable entre trabajadores y bodegueros, porque al final todos los que hemos asistido somos trabajadores también de bodega aunque algunos sean propietario o director de la misma”, declaró a lavozdelsur.es un portavoz de la citada asociación.
“La propuesta que nos trasladan es la misma que ha hecho el servicio arbitraje por lo que hoy jueves 29 decidiremos, porque todo lo hacemos por consenso y anoche no estaban todas las bodegas”, afirma. La asociación espera tener una decisión antes de las dos de la tarde “y permíteme que te diga que no sé si será positiva o negativa pero lo que si es cierto es que hay buen ambiente”.
Manuel Romero, secretario del sindicato provincial de Industria de CCOO, destacó anoche su buena impresión tras el encuentro con la Asociación Profesional de Bodegas de Sanlúcar.
“Esta otra patronal, denominada 'las pequeñas"' ha manifestado que Fedejerez no habla precisamente en su nombre, ellos no han mostrado interés ninguno por la flexibilidad, manifiestan que el 0,5% no pone en peligro la viabilidad de una empresa y nos han manifestado que pese a pasar por dificultades como todos, (por la situación generada por esta pandemia y la posterior guerra), entienden y valoran el gran esfuerzo que hemos hecho los trabajadores al rebajar nuestras propuestas en varias ocasiones para llegar a un acuerdo, por lo que han decidido valorar la propuesta, someterla a votación y asumirla en caso de no llegar a acuerdos con Fedejerez”.
Cuestión de intereses
Los intereses de estas once compañías vinícolas de la comarca noroeste no coinciden del todo con los de las grandes bodegas que controlan la patronal Fedejerez, y mucho menos con la fortaleza de unos y otros de enfrentarse a una huelga indefinida y sus efectos en las cuentas de resultados de la campaña especial de Navidad. Maxime cuando el sector sigue sufriendo una caída de las ventas importante.
De momento sigue el calendario de movilizaciones la comarca. Dos días antes de que comience el otoño caliente por parte de los sindicatos con movilizaciones en toda España -el 7 de octubre- tendrá lugar, salvo sorpresas, una huelga indefinida en el Marco de Jerez en un ambiente de ruptura de las relaciones entre la federación bodeguera y los sindicatos UGT y Comisiones Obreras. La desolación es total entre los trabajadores porque el pasado día 27 se daba por hecho un acuerdo gracias a una propuesta mediadora del Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales en Andalucía (Sercla).
La propuesta del mediador, Emilio Martin, satisfizo inicialmente las pretensiones de ambas partes si bien la unidad no era total en la federación bodeguera según fuentes presentes en las propias negociaciones donde está prohibido grabar y hacer fotos.
La propuesta contempla una subida salarial del 4,5% durante 3 años (2021, 2022 y 2023) con un 0,5% cada año consolidado. En total una subida del 15% en 3 años. Al parecer el grupo Osborne y Fundador estaban de acuerdo en la propuesta del mediador pero, tras unas consultas, el letrado de Fedejerez, José Miguel Caballero -que ha negociado en nombre de los empresarios los tres últimos convenios- regresó a la reunión con la negativa de la federación a asumir la propuesta.
Grandes perjuicios
Las grandes bodegas podrían tener dificultades para atender sus compromisos internacionales de ventas extraordinarias durante la campaña de Navidad. De los 1.500 trabajadores con que cuenta el sector en este momento, en torno a 500 son fijos discontinuos, cumpliendo la reforma laboral. En muchos de los 55 centros de producción con que cuentan las bodegas de la comarca se trabaja doble turno para atender las ventas.
El control de la federación está en manos de lo que los trabajadores llaman “el tridente” es decir la conjunción de intereses empresariales de Williams & Humbert, Fundador y González Byass.
Hoy jueves 29 de septiembre, en torno a las 11.30 horas aproximadamente, tendrá lugar una marcha sin interrumpir el tráfico rodado y posterior concentración de trabajadores de Bodegas Osborne, en las oficinas centrales de la empresa, en la calle Fernán Caballero, 7 del Puerto de Santa María.
“El motivo no es otro que la defensa del convenio colectivo de la vid y el mantenimiento del poder adquisitivo de los trabajadores del sector del Marco de Jerez, actualmente en huelga, tras no aceptar la patronal del sector Fedejerez, una propuesta de mediación del Sercla”, afirma Vicente Terrada, representante de los trabajadores.
Grupo Osborne cerró el ejercicio 2021 con unos ingresos de 211 millones de euros, un crecimiento del 33% aunque la cifra de ventas continúa por debajo de la que registró en el último ejercicio previo a la crisis sanitaria, cuando superó los 220 millones.
Curiosamente la raíz de las diferencias nacionales entre la CEOE y los sindicatos radica en la negativa de los primeros a asumir una subida salarial media de un 4,5%. Los secretarios generales de UGT y CCOO, Pepe Álvarez y Unai Sordo, han anunciado un primer calendario de movilizaciones para subir los salarios que se iniciará el próximo 7 de octubre, en el marco de la jornada Mundial por el Trabajo Decente, en colaboración con la Confederación Sindical Internacional (CSI) y la Confederación Europea de Sindicatos (CES), y finalizará el próximo 3 de noviembre con una gran manifestación en Madrid.
“El salario real está estancado desde 2008 y el salario pactado por convenio sólo ha subido un 2,8% con una inflación que sobrepasa el 10% y grandes empresas y banca que aumentan sus beneficios. Hay una crisis de suministros sin precedentes que está generando pobreza energética y la patronal se niega a establecer unas cláusulas de revisión salarial que protejan a los trabajadores en esta situación tan complicada”, manifiesta Pepe Álvarez, de UGT.
En el manifiesto del 7 de octubre se denuncia que “la fractura del contrato social como consecuencia de decisiones gubernamentales supone una amenaza para la propia democracia al tiempo que la represión contra organizaciones sindicales y la incapacidad de garantizar una legislación laboral justa alcanzan niveles sin precedentes”.
Esta situación – a juicio de UGT y CCOO- “se está viendo reforzada por el mito difundido por economistas, políticos conservadores, liberales y de extrema derecha, bancos centrales y medios de comunicación afines, según el cual la inflación es, de alguna manera, culpa de la gente trabajadora, y un aumento en los ingresos de las personas sería perjudicial para la economía. Eso es totalmente falso: la inflación en los pocos países que siguen contando con una indexación salarial automática se encuentra aproximadamente al mismo nivel que en países equiparables que no han aplicado incrementos salariales”.