Ni milagro andaluz, ni locomotora económica de España. Los datos señalan que la economía andaluza apenas ha variado su tendencia en la última década. De hecho, el aporte de Andalucía al país es actualmente menos de lo que era hace algo más de un lustro. Juanma Moreno reivindicó en su mensaje de Nochevieja el papel de la comunidad en el conjunto del país desde que el Partido Popular habita en San Telmo. Sin embargo, las cifras se mantienen estables y muy similares a las que había en los últimos años de gobierno socialista.
El último estudio publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) sobre la Contabilidad Regional de España muestra, incluso, que Andalucía ha caído a la última posición en cuanto a Producto Interior Bruto (PIB) por habitante. La comunidad nunca ha estado en las posiciones de cabeza, sin embargo, en esta actualización ha sido adelantada por Extremadura, comunidad que ha resistido mejor la crisis causada por la pandemia.
Esta misma semana, Andalucía presumía de ser la segunda comunidad que más había bajado el paro en el año 2022. De nuevo, estas cifras hacían referencia en términos absolutos porque en lo relativo, la comunidad volvía a estar un punto por debajo de la media anual. Las cifras, lógicamente, cobraban sentido por el número de habitantes de la región.
El hecho es que el crecimiento del PIB en 2021 no fue del todo malo, pero sí insuficiente. La economía andaluza creció un 5,5%. Dato que coincide con la media nacional. En términos absolutos, la comunidad aguanta como la tercera región que más aporta al total del PIB del país con un 13,3% en 2021, la última cifra que se conoce. Sin embargo, este porcentaje está lejos del más del 17% de peso poblacional que tiene la comunidad en España. Por delante se mantienen la Comunidad de Madrid y Cataluña a pesar de que ambas tienen menos habitantes que Andalucía.
La comunidad que actualmente preside Juanma Moreno se sitúa a la cola de las 17 autonomías españolas con 18.906 euros por habitante, seguida de Canarias y Extremadura con 18.990 y 19.072 respectivamente. La media estatal queda lejos con 25.498 euros por habitante y la de la Unión Europea con sus 32.430 euros per cápita, prácticamente inalcanzable. De hecho, tan sólo País Vasco y Madrid superan esta cifra en España.
Todo esto quiere decir que, aunque en términos absolutos la economía andaluza crezca cada año, lo hace en menor medida que el conjunto del país. La propia Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal estima que para el presente curso, es decir, el año 2023, la economía andaluza crecerá un 1,1% mientras que la española lo hará un 1,5%. A pesar de ello, el Gobierno de Moreno presumió en su momento de que la AIReF tomaba como factible el dato calculado por la propia administración.
La aportación económica de Andalucía a la riqueza del país lleva varios años estancada. Lo mismo pasa con la capacidad económica de los andaluces con respecto al resto de españoles. La convergencia ahora mismo es una utopía, aunque en este siglo hubo momentos en los que no lo parecía. El primer lustro supuso un acercamiento considerable de Andalucía a la media nacional. El PIB por habitante pasó de ser el 74% de la media nacional a principios del 2000 a superar el 77% en 2005. La tendencia era cláramente al alza, pero a partir de aquel momento comenzó a bajar. Todo ello, eso sí, con gobiernos socialistas.
No obstante, la llegada del PP, con Juanma Moreno a la cabeza, y las políticas liberales, no han cambiado la situación. El PIB por habitante se situó en 2021 en el 74,1% de la media nacional, datos muy similares a los de principio de siglo, aunque la renta media en términos absolutos era 6.000 euros menor. El dato, que aunque no es bueno tampoco podría considerar malo teniendo en cuenta los problemas estructurales de la comunidad, gana relevancia (de forma negativa) cuando se compara con el 2020 y se observa que los andaluces perdieron dos décimas en la convergencia.
Lejos de ser algo coyuntural, se trata de una situación que puede verse agravada este año. La diferencia de crecimiento que prevé la AIReF supone que los cálculos señalen que Andalucía va a volver a diverger con el conjunto de España por lo que el PIB per cápita podría volver a caer, aunque de forma más pronunciada quedándose en el 73% de la media nacional.
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