El Partido Socialista parece decidido a dar la batalla al PP en la fiscalidad. Si bien desde el Ejecutivo rechazaban hace unos días recentralizar impuestos para no torpedear la autonomía fiscal de las comunidades autónomas, el Gobierno de Pedro Sánchez ya ha confirmado que prepara nuevos tributos para que las grandes fortunas no eludan su responsabilidad fiscal y contribuyan proporcionalmente a las arcas públicas.
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ya había dejado claro que habría impuesto a los ricos, así como a la banca y a las grandes eléctricas, pero este lunes ha ido más allá hablando de un "nuevo paquete de medidas fiscales" que se conocerá en los próximos días y que irá en la misma dirección que el impuesto a las grandes fortunas, también nombrado como de "cohesión social".
A pesar de que ahora mismo existe un bloqueo en la negociación de los presupuestos reconocido por la propia Yolanda Díaz, ministra de Trabajo y cabeza visible de Unidas Podemos, desde la parte socialista confían en que la situación se desatasque más pronto que tarde. Los presupuestos incluirán el aumento de impuestos ya existente. Los tributos de nueva creación tendrán que ponerse en marcha a través de leyes específicas y propias, algo para lo que Montero espera una tramitación rápida.
Ademas, la ministra ha acusado al PP de practicar "populismo fiscal" por las bajadas de impuestos anunciadas en comunidades autónomas gobernadas por los populares, que según viene señalado el PSOE solo benefician al 0,2% má rico de la sociedad. En este sentido ha afeado al PP que por un lado baje impuestos y por el otro siga reclamando más fondos al Gobierno central y a Europa.
Montero ha advertido que ningún país del entorno europeo está ejecutando una política fiscal "indiscriminada" como la que a su juicio hace el PP y por tanto se deben pedir cuentas al principal partido de la oposición. En este sentido ha indicado que la UE está preocupada y ha reiterado que no se pueden "reclamar recursos" y por otro lado, en el ámbito de sus competencias, bajar los impuestos.
En la misma línea, ha acusado a la oposición de envolverse en la bandera y reclamar patriotismo pero solo para una minoría mientras que al resto lo dejan "a su suerte" en un "sálvese quien pueda", según lo ha calificado.
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