La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha lanzado una recomendación a todos los que tengan pensado comprar como regalos navideños aparatos tecnológicos o electrodomésticos: en su web advierte claramente de que es mejor esperar a enero.
¿Por qué? Porque, a partir del 1 de enero de 2022, entran en vigor una modificación de la Ley General de Defensa de los Consumidores y Usuarios que afecta a estos productos y a otros duraderos, como vehículos, adquiridos a partir de esa fecha.
En concreto, se amplía la garantía, que pasa a ser de tres años (antes era de dos). Además, se extiende a 10 años la obligación de mantener la existencia de piezas de reparación y de un servicio técnico adecuado a partir de la fecha en la que el producto deje de fabricarse. De este modo, se facilita la transición ecológica hacia un consumo más sostenible y luchar contra la obsolescencia prematura.
Otra novedad a la que hace referencia la OCU y que considera muy positiva para los consumidores, es que se amplía de seis meses a dos años el periodo en el que el comprador no necesita demostrar la falta de conformidad del producto lo que, según la Organización, facilitará la reparación.
Los datos que maneja la OCU apuntan a que el 40% de los consumidores afectados por un problema durante el periodo de garantía ni siquiera intenta que se lo reparen, por las dificultades que encuentran y el escaso plazo del que se dispone: seis meses en la actualidad, que pasará a dos años en 2022.