Las altas temperaturas impropias del mes de octubre ya están teniendo consecuencias en el día a día de la población. El Gobierno autonómico de Canarias ha tomado la decisión de suspender las clases en colegios e institutos durante los próximos días debido a la ola de calor que afecta a las islas.
El termómetro en el archipiélago está llegando a cifras de 30 grados. Unos datos que no difieren demasiado de los que se están viendo en Andalucía las últimas semanas. En el Valle del Guadalquivir se llegó hace unos días a los 35 grados. La decisión del Gobierno canario puede provocar un cambio de mentalidad en todo el país de cara a la emergencia climática que ya se deja ver.
El consejero de Educación, Formación Profesional, Actividad Física y Deportes del Gobierno de Canarias, Poli Suárez, ha indicado que la decisión de suspender las clases también se ha tomado teniendo en cuenta la alerta máxima por riesgo de incendios forestales decretada en el día de ayer y por la previsión de la Aemet.
Suárez ha querido dejar claro, además, que se trata de una decisión que se ha tomado "por responsabilidad" después de "muchas horas de trabajo y análisis" porque la situación en muchos centros educativos de Canarias estaba siendo "insostenible" por una ola de calor que está afectando tanto a alumnos como a docentes. En este sentido, ha indicado que la mayoría de las infraestructuras educativas de Canarias no reúnen las condiciones necesarias para poder atajar las altas temperaturas en las aulas.
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