Septiembre llega con el inicio del curso escolar, el inicio del curso político, y nuevas caras. En concreto, en la Junta, es la llegada de Carmen Castillo como consejera de Desarrollo Educativo, tras la reorganización del Ejecutivo andaluz que anunció este verano Juanma Moreno. Es la salida de Patricia del Pozo de una cartera a los dos años de su llegada, para retornar a Cultura, donde pasó la primera legislatura del cambio.
Ahora, el objetivo del Ejecutivo es que haya cierta normalidad. No es sencillo, toda vez que la comunidad educativa recuerda que faltan más de 3.000 profesores. La consejera ha asegurado tras el Consejo de Gobierno de este martes que el curso ha empezado con total normalidad. Y tanto ella como Carolina España, la portavoz de la Junta tras la remodelación del Ejecutivo, han defendido las cifras de inversión. Horas antes, en una entrevista, el presidente andaluz reconocía la enorme dificultad de la gestión de Educación y Sanidad, que generan continuamente manifestaciones "frente a San Telmo", pero haciendo balance positivo de sus cinco años en el poder.
Educación es el 20% del presupuesto andaluz. Entre todos los ciclos, son 1.796.455 estudiantes en enseñanzas no universitarias. Estos alumnos están distribuidos en 7.247 centros educativos de la región, siendo atendidos por cerca de 130.000 docentes, tanto en centros de titularidad pública, concertada y privadas. Según los datos proporcionados, el 94,4% del alumnado está escolarizado en centros sostenidos con fondos públicos, de los cuales el 80,2% pertenece a la enseñanza pública y el 19,8% a la concertada.
La Junta ha reconocido el descenso de alumnos, de 25.000 en total entre Infantil y Bachillerato. Desde el curso 2018/19, el sistema educativo andaluz ha experimentado una disminución de alrededor de 107.000 estudiantes, lo que representa una reducción cercana al 9%. Los sindicatos exigen que, así, se resuelvan los problemas de la alta ratio en muchos centros andaluces y que no se eliminen líneas, algo que no se está cumpliendo. Moreno, eso sí, ha asegurado que se sigue trabajando para que haya menos alumnos por clase.
El sistema educativo público cuenta con cerca de 123.000 docentes, de los cuales aproximadamente 107.000 pertenecen a la enseñanza pública, mientras que algo más de 16.000 están vinculados a centros concertados, según cifras de la Junta. Por su parte, el Gobierno andaluz ha defendido este martes el tercer incremento salarial de los docentes andaluces, que se hace efectivo a partir de septiembre, como parte del acuerdo de equiparación salarial con la media nacional. Este aumento beneficia tanto a los profesores de la red pública como a los de la concertada, y es parte de un plan a largo plazo que concluirá en 2025, con una inversión superior a los 200 millones de euros.
Otra de las cifras por las que la Junta habla en positivo del inicio del curso es que Andalucía ha destinado cerca de 886 millones de euros en ayudas escolares, que incluyen becas, transporte escolar, servicios complementarios y la gratuidad de los libros de texto para más de 481.000 estudiantes. En total, se estima que casi 900.000 alumnos se beneficiarán de la gratuidad de los materiales este curso. También ha habido, asegura la Junta, un incremento en los servicios complementarios, como el aula matinal, comedores escolares y actividades extraescolares. Un total de 2.323 centros ofrecerán estos servicios, un aumento significativo respecto a años anteriores, con una previsión de uso por parte de más de 190.000 alumnos en comedores escolares y cerca de 96.500 en transporte escolar.
La digitalización también jugará un papel clave en este curso, con la entrega de 91.233 dispositivos digitales a 1.600 centros docentes a partir de noviembre, algo que recordó en la mañana de este martes Juanma Moreno. Esta medida, que busca reducir la brecha digital, tendrá una inversión de más de 32,3 millones de euros y beneficiará a más de 550.000 estudiantes. Estos dispositivos están cofinanciados por los fondos Next Generation de la Unión Europea.
Por último, en cuanto a infraestructuras, la Junta ha completado o está en proceso de finalizar 350 obras en centros educativos, con una inversión de 124,2 millones de euros. Estas obras incluyen la construcción de siete nuevos centros, como el colegio Bahía de Almerimar en Almería y varios institutos en Granada, Málaga y Sevilla, además de ampliaciones y mejoras en instalaciones existentes, que beneficiarán a más de 150.000 estudiantes.
Por contra, los sindicatos han evidenciado que aún hay centros en los que persiste el amianto, un elemento de construcción que puede provocar cáncer y al que ha estado expuesto la población durante décadas, pero que desde 2022 debería estar retirado, algo que no ha ocurrido.