¿Qué estado de salud tiene la Formación Profesional pública en Jerez? ¿Hay suficientes plazas para la demanda existente? ¿Qué debe mejorar? ¿Hacia dónde se encamina en un futuro? Para responder a estas y otras preguntas se ha celebrado un coloquio en el Ateneo, titulado La formación profesional y el acceso al empleo.
En el acto intervienen Antonio Armario, profesor técnico de FP en el IES Andrés Benítez; Verónica Guerrero, presidenta de la Flampa (Federación Local de Ampas) Jerez; Luis Javier Gutiérrez, técnico de la dirección provincial del Servicio Andaluz de Empleo en Cádiz; e Ignacio Rodríguez, orientador del IES José Manuel Caballero Bonald.
Cada vez más alumnado opta por este tipo de formación. Y aunque en el curso presente, el 2023/24, la oferta pública en la provincia ha aumentado, la privada lleva años de ventaja, por su adaptación al mercado laboral o por sus mejores instalaciones, entre otros asuntos.
Jerez, concretamente, ha contado con la inclusión de cuatro nuevos ciclos, tres de FP Básica —Actividades Domésticas y limpieza de edificios, Informática y Comunicaciones, Actividades de Panadería y Pastelería, y Redes de Estaciones de Tratamiento de Aguas—; y uno de Grado Superior, la Dirección de Cocina obtenido. Pero sigue sin tener otros con los que podría contar, por la particularidad de la ciudad, como el de Gestión de Alojamientos Turísticos, Viticultura —está en El Puerto y Sanlúcar— o el de Energía Renovables —en Villamartín y Vejer—.
Para el curso 2023/24, se han ofertado un total de 21.318 plazas de nuevo ingreso de Formación Profesional en toda la provincia de Cádiz, de las que 1.120 son de nueva creación. Hay 39 nuevos ciclos formativos, contando cursos de especialización y programas específicos de Formación Profesional Básica, en Cádiz. En Jerez, hay seis nuevos ciclos de FP Dual —Sistemas microinformáticos y redes, Laboratorio Clínico y Biomédico, Instalaciones de telecomunicaciones y Mantenimiento de Vehículos, y Elaboración de productos alimenticios—.
Pero, ¿es suficiente? Armario, Guerrero y Rodríguez contestan a esta y otras preguntas a lavozdelsur.es. Antonio Armario lleva 39 años como docente. Ahora mismo, ejerce como profesor técnico de FP en el IES Andrés Benítez, impartiendo el ciclo de Soldadura y Calderería. Él lo tiene claro: a la FP pública le hace falta "invertir en profesores, en herramientas y que se modernice".
Armario, que ha conocido todos los sistemas de FP durante su trayectoria, lamenta que en los últimos años se esté fomentando la FP privada. Jerez es ejemplo de ello, con la apertura, pasada o inminente, de grandes centros de Formación Profesional. "A la FP pública le hace falta inversión, en personal, en herramientas, en maquinaria, y que se creen más plazas", insiste.
La pública, que es la que defiende, requiere una actualización, sostiene el profesor Antonio Armario. Para empezar, la normativa. En Andalucía aún no está adaptada a la Lomloe, la ley educativa aprobada a finales de 2020. "Hay jóvenes que terminan FP y aún son menores de edad, pues se encuentran con empresas que no quieren recibirlos por eso. No tiene sentido", se queja, a modo de ejemplo.
Para Armario, "hay que buscar un equilibrio", para que coexistan la FP pública, la concertada y la privada, sin que la primera quede reducida a la mínima expresión, mermando las posibilidades de formación de mucho alumnado que no tiene recursos económicos para estudiar en la privada. O que endeuda a su familia para hacerlo. Por eso anima a desinflar la "burbuja" del sector, para facilitar el acceso a esta enseñanza. Y orientarla hacia las necesidades del mercado.
Ignacio Rodríguez, orientador del IES José Manuel Caballero Bonald, con más de 30 años de experiencia a sus espaldas, también ha visto "cómo ha ido evolucionando" la oferta formativa. "El mayor problema de la FP es que es muy costosa", dispara en primer lugar. "Ofertar ciclos para la Administración supone un importante gasto". Por eso la privada, que es más flexible, está captando a más alumnos, por su adaptación al mercado.
"En Jerez el mayor problema, tanto en la oferta pública como en la concertada, es el poco dinamismo. Los centros no son capaces de variar la oferta en función de lo que el mercado demanda", insiste Rodríguez. Él, por su experiencia, considera que "la oferta de FP sostenida con fondos públicos es insuficiente. Se queda mucha gente sin entrar año tras año". Por ello, "la iniciativa privada cubre ese hueco, con una cantidad de ciclos apabullante".
Es cierto, matiza el orientador, que "en los dos últimos cursos la Administración está haciendo un esfuerzo por ofertar más ciclos, pero aun así sigue sin ser suficiente". "La privada oferta ciclos dobles, tiene posibilidad de estudiar a distancia, más facilidad para contactar con empresas en las que hacer prácticas... está haciendo cosas muy atractivas", dice.
La pregunta clave, para el orientador educativo, es "si la Administración quiere ponerse las pilas o va a seguir dejando que la privada cubra ese hueco". A su entender, no tiene sentido que en Jerez no haya ciclos sobre el sector vinícola, ni el ecuestre. "Tampoco creo que responda a una planificación torticera, sino a la dificultad de los centros para solicitar ciclos".
Como representante de la Flampa, Verónica Guerrero detecta que "el ritmo de crecimiento de la oferta concertada y privada es mayor que la pública". Por ello, por la falta de plazas y por las ventajas que da la privada, conoce a "familias que se entrampan hasta las cejas porque ven que ahí está el futuro".
Guerrero, no obstante, cree que el alumnado de la pública "sale mejor preparado", por eso lamenta que esté perdiendo peso, por la obsolescencia de la maquinaria en los ciclos que lo requieren, y por la falta de conexión con empresas, que ofrecen mejores prácticas a los alumnos de ciclos privados en muchas ocasiones. Por ello, pide a la Administración "más inversión y compromiso".
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