La delegación de estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Cádiz (UCA) critica que la institución universitaria permite realizar exámenes online en los campus de Algeciras y Jerez debido a la alta incidencia de casos covid en dichas ciudades, permitiendo la evaluación presencial en los campus de Cádiz y Puerto Real, a expensas de la evolución y de las restricciones que luego vendrían por parte de la Junta de Andalucía.
"A lo largo del pasado fin de semana varios centros de los campus de Puerto Real y Cádiz decidieron adelantarse, convocando a sus respectivas comisiones de garantía de calidad, con el fin de aprobar el cambio de modalidad ante el visible aumento de casos. A día de hoy y tras la última resolución del rector del pasado 19 de enero, todos los centros de la Universidad de Cádiz han cambiado de modalidad, pasando al sistema de evaluación online; excepto la Facultad de Ciencias", señalan en un comunicado.
"No solo no hemos pasado a modalidad online, sino que nuestra facultad, a través de su comisión de garantía de calidad y junta de facultad, celebradas el día 20 de enero, han decidido, con los votos en contra de los representantes de estudiantes y de algunos profesores, paralizar la convocatoria y aplazarla, llevándola al 15 de marzo, utilizando como argumento principal un posible cambio en la incidencia del SARS-CoV-2, manteniendo de este modo la convocatoria presencial", apunta la delegación de estudiantes.
"Empezamos el segundo semestre el día 8 de febrero, lo que implica que iniciaremos un nuevo semestre sin haber acabado el primero y sin saber si hemos aprobado o no. Además, si un estudiante tiene pensado ampliar matrícula, en muchos casos iría de oyente a las clases", recalcan. "Para solicitar ampliación de matrícula es necesario haber aprobado un número de asignaturas en el primer cuatrimestre, a lo que el decano ha dicho enérgicamente que en tiempos extraordinarios medidas extraordinarias y que se tomarían medidas como ampliar el plazo de matriculación o ampliar el número de créditos en los que te puedes matricular, obviando claramente que estaríamos cursando una asignatura sin saber si finalmente continuaremos con ella puesto que estamos a expensas de aprobar la suspensa".
La delegación de estudiantes de la Facultad de Ciencias de la UCA asegura en el comunicado que, "debido a la experimentalidad de nuestros títulos, existen muchas asignaturas donde son obligatorias las prácticas de laboratorio, que sin la posibilidad de ampliar matrícula, no podríamos realizarlas, ya que no figuraremos en las listas de clase". "Esta decisión también afecta a la fecha de finalización de curso. Como bien expusimos, aquí hablamos de compañeras y compañeros que finalizan su titulación y necesitan presentar su TFG o TFM antes de mediados de julio para continuar sus estudios o insertarse en el mundo laboral. Así como de los muchos estudiantes que tienen un piso alquilado y que verán cómo los precios de sus arrendamientos aumentan en los meses de julio y agosto".
"Dde llegar el 15 de marzo y no haber una mejora en la situación epidemiológica los exámenes se realizarán en formato online. Es decir, nos someteremos a todos estos desajustes en la planificación docente para al final realizar la convocatoria de manera online. Llegados a este punto, suponemos que el señor decano y la comisión de garantía de calidad se encuentran en posesión de algún aparato mágico, una especie de bola de cristal que los lleva a defender con tanta seguridad e ímpetu que la situación sanitaria va a mejorar lo suficiente como para hacer la convocatoria presencial en esas fechas", expresan.
Estas decisiones, para la delegación de estudiantes, "totalmente arbitrarias, no hacen más que añadir estrés e incertidumbre al estudiantado, ya que supone llevar al día las asignaturas que se cursan en el segundo cuatrimestre, más las asignaturas pendientes de examinar del primero. Lo más sorprendente, e indignante a la vez, es que en ningún momento se han propuesto buscar métodos alternativos de evaluación. En otras palabras, podría decirse que prefieren poner en peligro la salud y buen devenir académico de la comunidad universitaria antes que plantear soluciones eficientes y realistas dado el momento".
"Es del todo desconcertante ver cómo desde la dirección del centro siguen escudándose en estas exigencias, alegando que la presencialidad es la única manera de garantizar la validez de los exámenes y confiando ciegamente en una supuesta mejora del escenario sanitario, sin importarles los argumentos e inconvenientes expresados por el estudiantado y parte del profesorado, sin importarles el perjuicio que implica esta decisión y lo más interesante, poniendo en duda la validez de la evaluación de casi la totalidad del estudiantado de la Universidad de Cádiz", rematan.