Antonio Gago, un docente de Jerez y padre de un niño que está en atención temprana pendiente de diagnóstico, ha expuesto en redes una muestra de lo que considera parte del “destrozo educativo que está haciendo la Junta de Andalucía con sus recortes en la educación pública y que afecta al alumnado más vulnerable”.
Su pequeño, a la hora de entrar en un colegio el próximo curso, lo hace por turno de discapacidad. Tanto Antonio como su pareja eligieron como primera opción un colegio al que no podrá ir, pero tampoco lo hará a la segunda opción. Ni siquiera a la tercera. En ninguno de estos dos centros se ofrecieron plazas por turnos de discapacidad. “Lo que ha conllevado que niños con circunstancias parecidas a las de mi hijo se hayan aglutinado en los pocos centros que las ofertaban”.
Su hijo, finalmente, irá a la… ¡quinta opción! “No nos llaman desde la delegación y nos indican que la quinta opción que elegimos es la única que cumple con los requisitos y el personal profesional que necesitará mi hijo. Traduzco: los recortes que hace la Junta impiden que elijáis la opción que consideréis mejor para vuestro hijo”.
A Antonio, que sufre los recortes en sus propias carnes como docente interino, ahora le ha tocado padecerlos como padre. A pesar de que su hijo irá a la quinta opción elegida, no duda de “la atención que recibirá por parte de los profesionales del centro educativo al que asistirá, que será fabulosa, pero mi hijo Gabriel sufre un grave caso de agravio comparativo, pues si no entrara por turno de discapacidad, no hubiese tenido problemas para entrar en la primera opción que escogimos”.