Río San Pedro no se rinde. Es la consigna de las madres y padres de una barriada que, cada viernes, hace mucho ruido para protestar por el recorte de una línea de Infantil. A las nueve menos diez, el último día lectivo de la semana lo dedican a golpear cacerolas, sartenes y lo que se les ponga por delante para dejar claro a la Junta de Andalucía que no están de acuerdo con el recorte que piensa ejecutar el curso 2022-23 en la escuela infantil Viento del Sur de Puerto Real.
Más de 100 familias se han concentrado este viernes, primero en el CEIP Río San Pedro, para luego desplazarse a pie hasta la escuela infantil. La comunidad educativa de los tres centros de la barriada, incluyendo el instituto, están unidas para pedir a la Consejería de Educación que dé marcha atrás y no elimine una de las dos líneas de tres años que tiene Viento del Sur, “para garantizar una atención educativa de calidad”.
“El Río hace ruido por la educación”, se puede leer en la pancarta que portan los manifestantes, que organizan caceroladas cada viernes. La de éste ha sido la quinta. Y no cesarán hasta que tengan una solución. En esta lucha están implicadas las Ampas, madres y padres, pero también asociaciones, colectivos, comercios, representantes políticos y vecinos de la barriada.
En una carta dirigida al delegado territorial de Educación y Deporte de la Junta de Andalucía en Cádiz, Miguel Andreu, a la que ha tenido acceso lavozdelsur.es, la comunidad educativa de Vientos del Sur le pide que rectifique para evitar el grave perjuicio que ocasionará la eliminación de una línea de tres años a muchas familias. La misiva, además, va acompañada de 1.600 firmas de apoyo a la causa, aunque se siguen recogiendo.
“El colegio infantil Viento del Sur mantiene dos líneas el curso 2021-2022, con una media por aula de entre 15 y 17 alumnos. Es el único en la barriada Río San Pedro, con la responsabilidad de atender a los hijos de esta población, pero también a los de trabajadores de la Universidad de Cádiz, del polígono industrial El Trocadero y de otras empresas en el entorno”, recuerdan en la misiva.
Para el curso 2022-2023 hay 26 plazas solicitadas para la línea de tres años en Viento del Sur, con cuatro alumnos que lo tienen como segunda opción. En los últimos años, es habitual que se incorporen a lo largo del curso entre tres y hasta nueve pequeños, le reseñan al delegado territorial, recordándole que “mantener las dos líneas no supondrá un gasto administrativo, ya que es el estado actual”.
La carta recoge que “el centro ha destacado por su calidad y excelencia educativa, habiendo sido centro mentor y centro Telémaco”, y que ha sido “el primer primer únicamente de Infantil al que se le concedió ser comunidad de aprendizaje en la provincia de Cádiz”, siendo además “pionero y centro piloto del proyecto de innovación educativa Recuerdo inclusivo en el curso 2018-19”.
Además, se da la circunstancia de que los otros dos centros educativos de la barriada, el colegio y el instituto, son centros de compensatoria. La escuela infantil no está catalogada así "por no ser una etapa obligatoria". "La escolarización debe ser inclusiva y sensible tanto con las familias residentes en la barriada, como los trabajadores del área, ofreciendo plazas necesarias", reivindica la comunidad educativa en la carta dirigida a Andreu.
Con la eliminación de una línea de Infantil de tres años, "provocará un nuevo gasto económico y un cambio en la calidad de vida de muchas familias", recuerdan, ya que habrá que incluir los gastos de desplazamiento hasta Puerto Real o hasta Cádiz, a más de ocho kilómetros de distancia. "Aumentar la ratio reduce el espacio físico, así como la posible atención del profesorado sobre el alumnado, viéndose perjudicados sobre todo los NEAE (Necesidades Específicas de Apoyo Educativo) y aquellos que tienen dificultades de aprendizaje", inciden. Este curso ha habido 15 alumnos NEAE.
Comentarios