El sindicato CCOO ha denunciado las condiciones de trabajo de los profesionales sanitarios de Salud Responde del EPES-061, el servicio de atención telemática a la ciudadanía puesto en marcha por la Consejería de Salud y Familias desde hace años. Y en un comunicado ha revelado unos hechos que indican cómo se pretendió que altos cargos recibieran atención por delante de otros trabajadores del sector que estaban en primera línea del Coronavirus, como los trabajadores sanitarios de las escalas inferiores (auxiliares, empleados de emergencias en ambulancia y celadores) y del sector sociosanitario (atención a la dependencia), además de otros funcionarios tanto de entorno sanitario.
“En cuanto a la gestión de la crisis del Covid-19, desde la Dirección del servicio se informó al equipo de enfermería" de Salud Responde "que tenía que atender de forma preferente a altos cargos, personal sanitario (sólo médicos y personal de enfermería) y cuerpos de seguridad del Estado", indica CCOO en la nota enviada a los medios. Esto "ha incidido en la atención del resto de personal sanitario, sociosanitario y otros servicios esenciales (farmacéuticos, auxiliares de ayuda a domicilio, cuidadores de personas con discapacidad, funcionarios de prisiones, transportistas, personal de supermercados, etc.)".
CCOO habla genéricamente de altos cargos. Entre ellos, personal de dirección de hospitales, al menos, que son de designación directa por los altos gestores del SAS. Es decir, el orden de prioridad se estableció en estos altos cargos, policías, guardias civiles, gestores del SAS, médicos y enfermeros con la intención de poner en segundo grado la atención al resto de perfiles profesionales señalados. Y esto en un contexto de pandemia por coronavirus en el que surgierondesde marzo muchas dudas para saber detectar los síntomas de una enfermedad nueva. Según la denuncia del sector sanitario de Comisiones, se pusieron por delante estos perfiles a la sintomatología presentada. Salud Responde es una fórmula que incluye la resolución de dudas de menor calado, pero en la práctica funciona como triaje, es decir, valoración telemática de síntomas para recomendar o no una actuación médica. Por eso, esas valoraciones acaban en manos de profesionales, que son los que pueden prescribir una acción encaminada a la recuperación del paciente.
"De esta forma, el personal de enfermería no ha podido atender miles de casos sospechosos de personal esencial, lo que ha podido incidir en un incremento en la frecuentación de los centros sanitarios con el consecuente incremento de los riesgos de contagio”, asevera CCOO. Y hay que verlo con una perspectiva más amplia. Porque los propios profesionales hospitalarios tienen más posibilidad de acceder a recomendaciones de otros sanitarios in situ, con instrucciones además por parte de las direcciones sobre qué hacer ante una sintomatología compatible con Covid-19, algomuy relevante al principio de la pandemia, cuando aún se confundían (y seconfunden a veces) con otras patologías como la gripe estacional. Y la decisión fue la de dejar de lado a aquellos profesionales que atendían a personas de riesgo, como son por ejemplo los empleados de residencia, que pasaron a ser prioridad dos frente a otras solicitudes de información en Salud Responde.
Y todo esto en una de las comunidades con mayor índice de contagios detectados entre profesionales, y con focos en todas las provincias que han afectado a residencias. Ahora, la consejería de Salud deberá responder a la acusación realizada por Comisiones Obreras.