Las autoridades francesas han detenido en la noche del sábado a Pavel Durov, creador de Telegram y actual CEO de la compañía. La Policía ha actuado alrededor de las 20 horas en el aeropuerto de Bourget, a las afueras de Paris. Durov ya contaba con una orden de arresto.
En Francia se le acusa de no colaborar en la resolución de delitos graves. Los medios locales señalan que la orden de arresto se debe a "la falta de cooperación de Durov con la justicia francesa" al no identificar ni censurar a los usuarios de la aplicación de mensajería. Le acusan de ser cómplices de los delitos que se pueden cometer en dicha aplicación.
Entre los cargos potenciales por los que se ha detenido a Durov incluyen apoyo al terrorismo, tráfico de drogas, complicidad en delitos, fraude masivo, lavado de dinero, ocultación, contenido pedófilo o evasión de sanciones.
Y es que Telegram nació como una alternativa a Whatsapp, pero con un sistema de privacidad mucho más complejo donde se dificulta el acceso de las autoridades a determinadas actuaciones.
"Terminará en prisión preventiva, eso es seguro. en su plataforma, permitió que se cometieran innumerables delitos y delitos por los que no hizo nada para moderar o cooperar", han declarado a la televisión francesa investigadores próximos al caso.
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