Más de 7.300 cadáveres han sido recuperados hasta el momento bajo los escombros tras los terremotos que el lunes sacudían Turquía y Siria.
Las cifras de heridos también asustan: más de 38.000 hasta el momento. Todavía no hay una cifra oficial de desaparecidos y el número de muertos puede seguir subiendo en las próximas horas.
El drama es terrible. Las escenas que se están viviendo de dolor son desoladoras. Personas que buscan entre los escombros a sus familiares, niños que se han quedado sin nadie y casi 400.000 personas que han tenido que ser realojadas tras perder sus hogares.
Las labores de rescate no están siendo nada fáciles. Al frío hay que sumar los temblores de tierra que siguen produciéndose en la zona.
Afortunadamente, en algunos casos, el trabajo de los equipos de emergencia está dando sus frutos y se están encontrando a personas con vida bajo los escombros.
Turquía ya ha declarado el estado de emergencia en diez regiones que se han visto asoladas por los seísmos. La ONU, por cierto, ha anunciado que destinará 25 millones de dólares para ayuda humanitaria a las personas afectadas por los terremotos.
Militares españoles ya se encuentran en Turquía para ayudar en las tareas de búsqueda y rescate de personas.