Al menos siete personas han fallecido tras el ataque contra una iglesia de Testigos de Jehová en la localidad alemana de Hamburgo.
También son varios los heridos tras un tiroteo que tiene en alerta a la ciudad situada al norte del país. La policía ha lanzado un mensaje para que la población no se acerque a la zona donde ha tenido el lugar del suceso.
"La policía está trabajando a toda velocidad para dar con los autores y aclarar lo que ha sucedido", ha señalado Peter Tschentscher, alcalde de Hamburgo.
Un gran contingente de fuerzas especiales se ha desplazado hasta el lugar de los hechos para ofrecer protección a la ciudadanía y atención a los heridos.