Un avión con 61 personas a bordo se estrelló este viernes por la tarde en una zona residencial de la ciudad de Vinhedo, en el interior de Sao Paulo, en Brasil. La aerolínea indicó que en el vuelo viajaban 58 pasajeros y 4 tripulantes, y luego actualizó la cifra a 57. Según las autoridades locales, no hay sobrevivientes.
Los videos que se han hecho virales en las últimas horas muestran al avión cayendo en picado mientras gira en el aire como si fuera de papel. Las imágenes muestran una explosión y humo negro saliendo del lugar del impacto.
Pero el caso que está siendo más comentado en las últimas horas es el de Adriano Assis. Llegó al aeropuerto para tomar ese vuelo, pero el mostrador estaba cerrado y se marchó a tomar un café. Cuando volvió para realizar el check-in le dijeron que había llegado tarde y, después de discutir con el empleado, se quedó en tierra. "Me salvé porque el empleado hizo su trabajo".
También corrieron la misma suerte Izael Souza Silva y José Felipe Araújo, que agradece a Dios su ayuda para esquivar el fatal desenlace: "Creo que fue Dios. Había unas 10 personas quejándose al empleado porque no nos había dejado entrar. Cuando salieron las noticias, todo el mundo decía que el avión que iba a Guarulhos se había estrellado, no podía sostenerme en pie. Me temblaba todo el cuerpo".
El vuelo de Voepass Linhas Aéreas que se estrelló no avisó de ninguna emergencia antes del impacto, según las investigaciones preliminares, dijo el jefe del Centro de Investigación y Prevención de Accidentes Aeronáuticos (CENIPA) de Brasil.