Un bebé de unos 22 meses ha muerto este sábado en el municipio malagueño de Coín, en el Valle del Guadalhorce, después de que sus padres lo llevasen al centro de salud de la localidad con síntomas de ahogamiento, al parecer por un accidente en una piscina particular.
Los hechos se produjeron en torno a las 11 de la mañana, cuando el centro de coordinación del 061 recibió avisos del centro de salud sobre lo que ocurría, según han informado a Europa Press fuentes de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias
Entonces se decidió pedir un helicóptero para trasladar al menor al el Hospital Materno Infantil de Málaga, pero los sanitarios tras realizarle técnicas de reanimación no pudieron hacer nada por salvar su vida. El Instituto de Medicina Legal se encargará de la autopsia.