El Boletín Oficial de la Provincia (BOP) de Cádiz recoge este jueves 26 de agosto el inicio del expediente, aprobado en pleno en julio pasado, para la celebración de consulta popular sobre conversión del municipio de La Línea de la Concepción en ciudad/comunidad autónoma. Abierto el periodo de exposición pública de veinte días, el Consistorio linense da un paso más en los trámites previos para celebrar una consulta ciudadana en la que se preguntará: "¿Cree usted conveniente que el Ayuntamiento de La Línea de la Concepción eleve al Gobierno de la Nación y a las Cortes Generales una petición para instar la conversión del municipio en comunidad autónoma de acuerdo con el art. 144 a) de la Constitución española?”.
El anuncio en el BOP, que firma el alcalde Juan Franco (La Línea 100%), da paso a un periodo de alegaciones, aunque en última instancias la mayoría absoluta del pleno puede convocar la consulta. Dicho referéndum persigue, según recoge su memoria justificativa, a la que ha tenido acceso lavozdelsur.es, "que los ciudadanos y ciudadanos de La Línea de la Concepción se pronuncien sobre la conveniencia o no de que el Ayuntamiento solicite a las Cortes Generales y al Gobierno de la Nación la aplicación del mecanismo constitucional que permita el acceso a la condición de Ciudad Autónoma. Una votación favorable por parte del conjunto de linenses a esta solicitud encaminaría positivamente el recorrido de la petición que formulase el Ayuntamiento ante los órganos constitucionales legitimados para que, previa valoración de la concurrencia de un interés nacional, se le autorizase la celebración de una consulta popular a modo de referéndum y mediante un procedimiento electoral previsto en la Ley 2/2001, de 3 de mayor, de Regulación de las Consultas Populares Locales de Andalucía".
Entre la documentación que refuerzan la viabilidad de la búsqueda del "autogobierno" en La Línea está un dictamen legal (procedimiento y competencias que se asumirían por el Ayuntamiento de convertirse en ciudad autónoma) elaborado por el catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad Complutense, Antonio de Cabo de la Vega. Este municipio del Campo de Gibraltar, recoge la memoria, "se ubica en una posición estratégica entre los continentes Europeo y Africano y, desde una perspectiva histórica, se convierte en un territorio decisivo en el siglo XVIII para frenar la invasión del territorio español tras la toma de Gibraltar, configurándose como luego veremos en una Ciudad-frontera condicionando su estructura urbana, económica y social su a lo largo de los años".
La Línea presenta una extensión territorial alargada en dirección norte-sur de 26 kilómetros cuadrados. Tiene como límite oriental el Mar Mediterráneo, y como extremo occidental parte del arco de la Bahía de Algeciras y el Municipio de San Roque. Se encuentra conformado por un núcleo principal y otros dos núcleos urbanos y un importante porcentaje de población que se encuentra diseminada por la extensión del Municipio. Asimismo,"se caracteriza por una ubicación en el territorio compleja, que ha tenido históricamente resultados desiguales: por un lado, forma parte de la Bahía de Algeciras, pero por otro es nexo físico de unión con dos zonas de fuerte atractivo socioeconómico: la Costa del Sol y Gibraltar. Presenta una población de más de 62.940 habitantes y una densidad de población de 3.282,02 habitantes por km2.
De la Guerra de Sucesión al 'Brexit'
Toda la historia de La Línea, recuerda el dictamen legal, está ligada estrechamente a la existencia contigua del Peñón de Gibraltar, enclave que la Corona británica consiguió arrebatar a la soberanía española mediante el Tratado de Utrecht (1713) tras la Guerra de Sucesión (1701-1713) y que hoy cuenta con más de 35.000 habitantes. A partir de ahí, una historia de conflictos diplomáticos hasta llegar al Brexit, que ha terminado dinamitar las relaciones y que, a menudo, ha generado agrias tensiones en la frontera artificial que los británicos levantaron en 1908, la llamada Verja.
"La característica unívoca que define la singularidad de La Línea de la Concepción —reza la memoria justificativa de la consulta— es su naturaleza fronteriza con el enclave británico de Gibraltar, pendiente de descolonización, y con un istmo ocupado ilegalmente también por este enclave. De esta situación se deriva una dependencia económica muy relevante, que permite que mínimas modificaciones o alteraciones políticas en la relación entre los dos países, España y Reino Unido, afecten singularmente a La Línea con fuertes repercusiones directas sobre su ciudadanía y su economía".
Una Carta Económica Especial que nunca llegó a puerto
En el Informe elaborado por el Área de Derecho Internacional Público y Relaciones Internacionales de la Universidad de Cádiz, que obra en poder del Ayuntamiento de La Línea, se indica que este "municipio reúne un conjunto de características singulares únicas en España: es el único municipio europeo que linda con un territorio pendiente de descolonización según las Naciones Unidas; el único que es contiguo a un territorio, el istmo, sobre el que pesa una reclamación permanente de soberanía por parte de España; el único que hace frontera con un aeropuerto militar de otro Estado con el que no hay coordinación de ningún tipo, con los riesgos de seguridad que ello conlleva para la población del municipio y, en fin, es uno de los territorios que más están sufriendo, y de forma más directa e intensa, las consecuencias del Brexit, dada la dependencia económica con Gibraltar".
La dependencia económica de La Línea se traduce, además, en cifras de desempleo cercanas al 35% de la población activa, con una media de nivel formativo excepcionalmente baja si la comparamos con el resto de España, así como problemas alarmantes de narcotráfico y exclusión social. Más de 10.000 personas, de las no más de 70.000 que habitan La Línea, son trabajadores transfronterizos que acuden a diario a Gibraltar por una carretera estrecha que atraviesa la población y que, al llegar a la frontera, se canaliza a través de un conjunto de checkpoints, tanto españoles como británicos. Colapso de tráfico agravado por el alto número de visitantes que llega a la Roca por la carretera que atraviesa el núcleo urbano, uno de los más contaminados de España y que soporta este tránsito de 4 millones de vehículos al año.
Esta singularidad de La Línea ha sido reconocida por el propio Estado español, que en enero de 1997 creó la Comisión Tripartita entre la Administración General del Estado, la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento linense, para abordar los problemas específicos de la localidad. En ese marco se acordó una Carta Económica Especial, "aceptándose que La Línea planteaba una serie de condicionantes geográficos, históricos y socioeconómicos que la hacían valedera de un trato diferenciado. Sin embargo, y como reiteradamente ha puesto de manifiesto la Corporación municipal, esa Carta Económica y la propia Comisión Tripartita apenas han tenido virtualidad en la mejora de las condiciones de La Línea, de ahí el malestar actual y las pretensiones de autonomía propia de las que deriva este dictamen".