En las jornadas electorales los participantes se dividen en ganadores y perdedores. En esta ocasión, la lista de ganadores es breve. El Partido Popular se alzó como el gran triunfador. Si abrimos el abanico, quizás, podríamos incluir en este pequeño grupo a Adelante Andalucía que, tras quedar fuera del grupo parlamentario y estar sin recursos económicos vuelve a la cámara autonómica. Más allá de ambas formaciones no hay más partidos o coaliciones que puedan estar medianamente satisfechas a pesar de que algunas de ellas intentan ofrecer este relato de cara a los medios de comunicación.
Entre los perdedores hay más variedad y hasta es complicado decir quién es el que sale más dañado de todos los que concurrieron a las elecciones. Ciudadanos tiene muchas papeletas al haber desaparecido del Parlamento de Andalucía, aunque era algo que se podía intuir. Sus líderes ya hablan de una posible refundación. En Vox fueron ellos mismos los encargados de poner las expectativas por las nubes con una performance de Macarena Olona en el segundo debate donde le ofreció a Moreno Bonilla ser su vicepresidente.
Tampoco se puede obviar el resultado del Partido Socialista de Andalucía. La candidatura de Juan Espadas ha logrado los peores resultados de la historia del PSOE por detrás, incluso, de los que obtuvo hace cuatro años Susana Díaz cuando los socialistas perdieron la Junta de Andalucía tras 37 años. Sin embargo, detrás de todo ello, con menos impacto mediático, está la situación de Por Andalucía. Es algo complicado de valorar porque anteriormente se presentaron en coalición con Teresa Rodríguez cuando esta lideraba Podemos. Cuatro años antes, Izquierda Unida logró cinco parlamentarios en la legislatura posterior al Gobierno de coalición con el PSOE. Más atrás quedan los tiempos del histórico Anguita.
En esta ocasión Por Andalucía ha logrado cinco diputados, pero en las tripas de la coalición hay muchas sensaciones distintas. Desde la coalición señalan que hubieran considerado como un buen resultado llegar a siete u ocho escaños. Los cinco finales han sido un jarro de agua fría a pesar de que la sensación dentro de la coalición era de haber realizado una buena campaña que, además, había contado con el impulso de Yolanda Díaz en la última semana. Las reacciones desde entonces han sido apuntando a la candidatura de Adelante Andalucía por la división de los votos, "podríamos haber adelantado a Vox", dice un miembro de la coalición.
La coalición está formada por seis partidos – Izquierda Unida, Podemos, Más País, Equo, Alianza Verde e Iniciativa del Pueblo Andaluz –, pero todos no pueden estar igual de satisfechos con los resultados electorales. Por Andalucía consiguió escaño por Cádiz, Sevilla, Málaga, Córdoba y Granada. Esto no es algo baladí porque condiciona la representación de los integrantes en la coalición dentro del Parlamento de Andalucía. Podemos, que tenía cuatro cabezas de lista, logró tres diputados, Izquierda Unida uno (Inmaculada Nieto) y Más País otro.
El resultado fue histórico porque el reparto provoca que el Partido Comunista de Andalucía se ha quedado sin representación parlamentaria en la comunidad por primera vez desde 1982, cuando irrumpió con diez diputados. El PCA, integrado en IU, siempre había logrado diputados. Hasta estas elecciones. Inma Nieto está estrechamente vinculada a este espacio, pero no forma parte de los comunistas andaluces. La situación es delicada ya que el PCA venía de aportar hasta cinco diputados en la anterior legislatura. Los órganos del partido se reúnen esta semana para hacer una valoración oficial, sin embargo, un dirigente señala que esta situación sólo responde a “unos malos resultados” de la coalición y señala que en Jaén ha estado cerca de repetir Mamen Barranco, escaño con el que contaban al ser cabeza de lista, mientras que en Cádiz las opciones pasaban por la número dos, Alba Zambrano, también parlamentaria en la anterior legislatura.
Los comunistas quitan hierro al asunto y recuerdan la etapa de Gaspar Llamazares en el Congreso donde el PCE tampoco tuvo representación en los dos diputados de IU. Dentro de la formación tienen claro que la prioridad ahora mismo es la unidad de todo el espacio de la izquierda, dejando a un lado los repartos y las siglas. Además, Ernesto Alba, secretario general del PCA, señala que el partido está presente en casi 60 alcaldías y tiene alrededor de 1.000 concejales en el territorio. Además, recuerda que ha pasado momentos peores, refiriéndose al franquismo, “cuando más creció el partido”.
Actualmente, el Partido Comunista de Andalucía cuenta con unos 3.000 militantes en la comunidad, siendo el territorio que más aporta a la formación estatal. También están presentes en el Gobierno con la presencia de Alberto Garzón, mientras que el secretario general del PCE, Enrique Santiago, tiene una secretaría de Estado.
El acuerdo por el reparto de los puestos de salida en las listas llegó en el último momento del último día de plazo. Los partidos acordaron que Juan Antonio Delgado liderara Cádiz e Inma Nieto hiciera lo mismo en Málaga. Fue tan tardío que, incluso, Podemos llegó tarde al registro, algo que provocó que sus siglas no estuvieran en las papeletas el pasado 19J. Más tarde se conocieron las listas definitivas y la composición en la que Podemos e IU se repartían la mayoría de primeros puestos mientras que Iniciativa del Pueblo Andaluz y Equo copaban algunos terceros y cuartos. Más País quedó más relegado por haber logrado que Esperanza Gómez fuera la número 1 por Sevilla.