La comisión de investigación del Parlamento de Andalucía sobre la Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo (Faffe) retoma esta próxima semana, el viernes 7, sus trabajos con la programación de dos nuevas comparecencias: Juan Carlos Carrillo Morillo y Paco Camas, concejal jerezano.
Para Camas supondrá su segunda citación por cuanto el 9 de abril rehusó comparecer ante la comisión. Este tercer teniente de alcaldesa y concejal de Dinamización Cultural y Patrimonio Histórico de Jerez alegó entonces que su convocatoria no la había recibido en tiempo y forma. Con estas dos citas se cierra un primer bloque de 40 comparecientes, según explicó el presidente de la comisión, Enrique Moreno, sobre la marcha de los trabajos.
El segundo bloque de comparecencias, integrado por 22 propuestas, arrancará a partir del 21 de mayo y lo hará con los representantes de los sindicatos SAF (Sindicato Andaluz de Funcionarios) y CSIF. Moreno calculó que dentro de esta segunda fase de comparecencias se producirían "a mediados de otoño" las citaciones de la secretaria general del PSOE, Susana Díaz, y de la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero.
El presidente de la comisión de la Faffe explicó que las comparecencias de la comisión de la Faffe se programan los viernes de las semanas parlamentarias que no se celebran Pleno y hay comisiones y las citaciones se hacen al ritmo de dos personas por cada sesión. Moreno trasladó que el informe de conclusiones de la comisión de la Faffe concluirá a finales de noviembre.
El exalcalde de Lebrija y exdirector de Recursos Externos de la Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo (Faffe), Antonio Torres, fue el último compareciente ante la comisión de investigación del Parlamento.
Torres sostuvo el 9 de abril que "nunca enseñé el carnet del PSOE" para trabajar en la Faffe, explicó que su procedimiento de contratación fueron tras dos entrevistas con el director general técnico, Fernando Villén, reconoció un sueldo bruto de 68.752 euros de la categoría de técnico superior, afirmó que "nunca tuve tarjeta de gasto de la Faffe, no sé que es eso" y que "era una oportunidad tener a Antonio Torres en la Faffe".
En una comparecencia que se prolongó durante tres horas y media, Torres relató su procedimiento de contratación, que empezó siendo temporal y al año y medio se convirtió en indefinido.
Su contratación se produjo en 2003, para el ejercicio de "tareas propias de directivo formado y con experiencia en docencia universitaria", y concluyó en 2011 tras la extinción de la Faffe, momento en que pasó a ser personal subrogado del Servicio Andaluz de Empleo (SAE) hasta su jubilación tres años después.