"La economía andaluza está colonizada por empresas que no tributan aquí, en eso hay que poner el foco"

¿Qué le trae por Cádiz, está en precampaña de autonómicas?

Hace una semana decidimos que la pandemia no podía parar más la expansión de Andalucía X Sí, y empezamos a movernos con mucha cautela, por supuesto, pero queriendo darle continuidad a nuestro congreso, que tuvo lugar el pasado 30 de enero. Ciertamente, viendo la situación política en Andalucía y la posibilidad de unos comicios en no demasiado tiempo, es necesario que orgánicamente nos movamos y nos demos a conocer. Nuestro proyecto surgió hace cuatro años y en la provincia de Cádiz tiene su mayor representatividad, por lo que es un territorio en el que hay que dar mucho más empuje. Históricamente, el andalucismo tuvo en Cádiz su feudo más importante y queda ese poso, esa base sólida, que nos puede dar mucha representatividad en el futuro.

¿Cómo están las bases?

Pues la verdad que muy ilusionadas. El congreso, con unos 300 participantes telemáticamente, fue un triunfo y nos permitió dar un reimpulso al partido; hemos generado ilusión entre la gente y se nota que se cree en él. Las circunstancias políticas nos obligan a pelear por esto como nunca. Conocemos las circunstancias del centro izquierda político en Andalucía y conocemos las de ese Gobierno andaluz de las tres derechas, y ahora mismo el andalucismo, no voy a decir que sea más necesario que nunca en la historia, pero sí en igualdad de condiciones con aquel del inicio de la Transición democrática, con aquel PSA, aquella Asamblea por Andalucía, que tuvo tanto peso y tanta repercusión, y tanta importancia en que la Transición en Andalucía fuera de una determinada manera.

¿Qué diferencia hay entre el andalucismo que encarna este proyecto y el del extinto PA?

Los anteriores se extinguieron y, aunque hay diferentes movimientos andalucistas, sí es cierto que el único que tiene representatividad institucional es el nuestro, que tiene peso orgánicamente y convicción de continuidad. ¿Qué diferencia hay con proyectos anteriores? Las personas, por supuesto, porque somos diferentes, y la sociedad, que ha evolucionado y los intereses ahora son diferentes. El fondo del andalucismo no cambia, tiene su fundamento en poner Andalucía en el centro del debate permanentemente. Poder andaluz, poder andaluz y poder andaluz. Es el único antídoto ante las circunstancias actuales de crisis. Siempre lo fue y ahora se vislumbra más que nunca porque esta pandemia ha aflorado todas las carencias de forma flagrante. El paro aquí tiene una subida mucho más importante que en otros territorios, o las carencias en la sanidad pública se notan más.  Es un proyecto, además, sustanciado en personas que veníamos de otros proyectos andalucistas, como es mi caso, pero en otras muchas personas que no habían estado antes en otros partidos políticos. Por tanto, es un proyecto diferente que pone a Andalucía en el centro desde una perspectiva de cobertura del Estado del Bienestar, de justicia social y también con una visión muy puesta en la economía.

¿Pero cuál diría que es la gran novedad que plantea AxSí?

El andalucismo en los últimos años estuvo muy centrado en lo emocional, en los símbolos, y creo que hay que empezar a hablar de economía, lo que de verdad rige los designios de la sociedad. Y la economía andaluza sigue siendo una economía colonizada por empresas de otros territorios, que no tributan aquí, y en eso hay que poner el foco. No puede ser que las dos mayores refinerías del Estado estén en Palos de la Frontera y en San Roque, y que esas compañías no tributen en Andalucía. No puede ser que de las cien empresas más importantes de España, el 60% esté en Madrid y en Andalucía haya unas cinco, cuando realmente la economía andaluza sería la más potente del Estado si esas empresas tributaran aquí. Ahí hay que poner el foco de una vez por todas. Por supuesto, no podemos olvidar la emotividad y lo que nos identifica porque eso es lo que nos hará pelear sin fisuras por esas necesidades de nuestra tierra.

"No tiene sentido reducir impuestos si no se pueden mantener los servicios básicos del Estado del Bienestar"

¿Es la solución como se plantea una especie de réplica del modelo de ‘dumping fiscal’ de Madrid?

No, nosotros creemos que plantear eso en Andalucía no es comparable. Poner a Madrid como referente no tiene ningún sentido, sobre todo cuando hay elementos fundamentales del Estado del Bienestar como la sanidad que en 2021 tiene un presupuesto en la Junta reducido en un 1,73%, unos 200 millones menos. No tiene sentido reducir impuestos si no se pueden mantener los servicios básicos del Estado del Bienestar. Cuando usted sea capaz de mantener esto, reduzca impuestos porque no los necesita, pero las cuestiones fundamentales del Estado del Bienestar tienen que estar absolutamente respaldadas y eso se hace con los impuestos, con el dinero con el que contribuimos todos y especialmente los que más tienen.

¿Qué mecanismo proponen ustedes para atraer empresas?

Sobre todo, hay que exigir a las que ya están. Usted va al País Vasco y Repsol ha creado una filial que es la que monta las gasolineras del País Vasco. Verás muy pocas gasolineras que no sean de Petronor en el País Vasco, y esa filial tributa allí. Eso es lo que tenemos que hacer, potenciar andaluzamente nuestra economía. No podemos permitir que estemos colonizados por otros territorios del Estado y estemos tan felices. Eso es lo que hay que hacer, exigir que quienes estén aquí instalados tributen aquí, antes que el dumping fiscal.

¿Andalucía se quiere poco hasta en el debate político, no tiene la sensación de que la discusión pública se dicta desde Madrid?

No sé si alguien se ha enterado de que hay elecciones en Madrid… venía escuchando el debate en Canal Sur de esta mañana y todo se ceñía a las elecciones de Madrid. En fin. La degeneración política, y de la ausencia de Andalucía en el debate, es terrible. No hablamos realmente de los problemas de Andalucía. Se corre un tupido velo sobre las dificultades que esta tierra tiene y va a tener. Hay que valorar que se vacune a buen ritmo, que permitirá salir de las terribles circunstancias sanitarias, pero es que ahora vienen las económicas y será muy difícil. Yo soy alcalde y el año pasado ya tuvimos que quintuplicar el presupuesto de ayudas extraordinarias. Este año el presupuesto está al mismo nivel. Las familias más pobres de Andalucía lo van a tener muy difícil y sobre eso no se está hablando, y hay que poner eso sobre la mesa.

Los alcaldes son los que están en la primera línea política y en pandemia, a nivel general, lo han demostrado sobradamente. ¿Da otra sensibilidad eso a un aspirante a presidir la Junta?

Soy de la opinión de que todo el que quiera ser diputado, parlamentario… tiene que ser antes como mínimo concejal de gobierno en su pueblo. La oposición te da una perspectiva, pero gobernar tu municipio te acerca a la gente, conoces los problemas reales y gestionas desde dar una ayuda extraordinaria para pagar un recibo de luz, diseñar un PGOU o que una empresa importante se pueda instalar en tu pueblo. Te da una visión política muy amplia de cuáles son las necesidades reales de la gente, es fundamental y entiendo que los que somos alcaldes actuamos en política de forma diferente.

"La mediocridad instalada en la política andaluza es palmaria. Creo que es necesario bajar al terreno, dejarse de titulares, de tantas asesorías y de tanto comprar periódicos, y dedicarse más a la realidad"

¿Es mediocre la política actual y, en concreto, la andaluza?

La mediocridad instalada en la política andaluza es palmaria. Creo que es necesario bajar al terreno, dejarse de titulares, de tantas asesorías y de tanto comprar periódicos, y dedicarse más a la realidad, ver qué ocurre de verdad en la sociedad. Esa burbuja política hay que pincharla y hay que pincharla no con más trincherismo político. Venimos a la arena política andaluza sin armas para meternos en las trincheras, y sí con excavadoras para quitar esas trincheras. El debate político tiene que echar abajo la pelota, hablar y dejar de discutir. El 90% de la ciudadanía, dicen las encuestas, no confía en los partidos políticos, y eso es terrible para la democracia. Hay que desterrar discursos de odio del rival político. Estamos en un belicismo político permanente y hay que utilizar más la palabra y el debate.

¿Y cómo se sale de esa rueda, no cae usted a veces?

Toda la sociedad en general está metida en esa vorágine, los propios medios… si no das un titular en esa línea casi que no sales. Entonces es muy difícil encontrar el equilibrio entre el hooliganismo necesario para poder sacar un titular interesante para los medios y lo que necesita la sociedad desde el punto de vista de la opinión. Es difícil, pero estamos intentándolo, transmitir a la gente un mensaje más sosegado y un mensaje pleno de sentido común y que se entienda.

Hace poco se hablaba de que se estaba en campaña permanente, pero es que ahora ya prácticamente en cualquier momento puede haber elecciones o mociones de censura en cualquier sitio…

Sí, sí, y ya no son solo las elecciones, es que vemos precampaña de primarias que ocupan permanentemente los titulares de los medios de comunicación. Entonces, claro, hay incertidumbre permanente en la sociedad… es necesario salirse de ese embrollo, generar más tranquilidad en la sociedad y crear menos incertidumbre, que nos viene bien a todos, por supuesto a la gente y a la economía.

Hablando de adelantos electorales, ¿usted ve la legislatura llegando hasta final del año que viene?

Bueno, todo apunta a que va a haber adelanto, pero quizás habría que concretar cuándo. Si será mucho o menos adelanto. Dependerá un poco de la situación del presidente actual en los sondeos, de las circunstancias de Cs, que parece que va a pique… Aquí no se mira el interés del ciudadano, sino del partido.

Si hay elecciones antes o después en Andalucía, ¿AxSí en qué estantería ideológica del súper electoral se moverá?

Nuestra ideología está escrita, se puede ver en nuestra página web. Por resumir, y no hablar de conceptos pasados en el tiempo, lo de la izquierda y la derecha: tenemos Andalucía en el centro y todo ello con connotaciones vinculadas a lo que te he comentado: Estado del Bienestar, justicia social y economía andaluza. Todo eso está por encima de todo lo demás. Es lo fundamental de nuestra línea ideológica que puede entenderse dentro de lo que es la socialdemocracia política.

En todo caso, no aspiran a ser el PNV o la CUP andaluza…

Nosotros la CUP andaluza no queremos ser, el PNV tampoco. De hecho, no creo que haya posibilidad de identificación ideológica entre lo que ocurra en Cataluña o el País Vasco y Andalucía. ¿ERC es muy de izquierdas, el PNV, de derecha? ¿Eso quién lo dice? Y en todo caso, son territorios totalmente diferentes, no son extrapolables los proyectos y los conceptos políticos entre esos territorios.

¿Y le preocupa la competencia con Andalucía no se rinde, el nuevo proyecto marcadamente andalucista de Teresa Rodríguez?

Andalucía no se rinde tendrá que decir qué es lo que es, porque hasta ahora era Adelante Andalucía, que hemos visto que ha sido un fracaso y una decepción enorme para quienes creyeron que era un partido que defendía el andalucismo político, y se ha visto que era algo centralista dirigido por Pablo Iglesias desde Madrid; en el momento en que se ha sacado más de la cuenta la verde y blanca le han cortado la cabeza. Por tanto, el proyecto andalucista que existe en Andalucía es AxSí, lo demás tendrá que definirse, pero nosotros ocupamos ese espacio electoral y espero que sea el que los andaluces apoyen de ahora en adelante.

Hay una gran ola que reivindica la identidad andaluza desde el mundo de la cultura, algo de lo que apenas se habla en el debate político.

Es un movimiento fundamental. El mundo de la cultura y la identidad andaluza impulsó el andalucismo desde la Transición y lo hizo importante porque le dio una base sólida en la sociedad civil. No hay un movimiento político que esté comprando eso que ha surgido de forma espontánea y es muy esperanzador que haya gente joven y gente de la cultura defendiendo nuestra identidad y nuestros símbolos andaluces. Eso es fundamental para que un movimiento andalucista tenga éxito a corto plazo, pero no es solo la bandera y el himno, es mi dialecto, mi cultura, mi historia y, a todo eso, nosotros queremos añadirle nuestra economía, porque todo lo emotivo y lo identitario si no va acompañado de eso se queda en colonización o secuestro externo.