Son las ocho y media de la tarde y decenas de personas esperan impacientes entre el reloj de Losada y las botas de la plaza del Arenal. Desde el otro lado —estatua de Primo de Rivera al fondo—, una tal Teresa Rodríguez se va acercando con un carrito de bebé y una compañera. Es una más. "¡Teresa, vamos!", le dice un militante de Adelante Andalucía. Unos con la arbonaida, otros con camisetas de merchandising underground andalucista, pero casi todos con la verde y blanca de por medio.
Jerez ha sido la ciudad elegida por Adelante Andalucía para iniciar el difícil camino hacia el 19J. La coalición de Anticapitalistas y andalucistas —Izquierda Andalucista y Primavera Andaluza— ya viene de una dura precampaña. El recurso que presentaron sus antiguos compañeros —Izquierda Unida y Podemos en Por Andalucía— para que no estuvieran en los debates electorales, les ha dado visibilidad y una oportunidad para diferenciarse en el mapa político. La expulsión de los nueve diputados del grupo parlamentario esta legislatura por sus anteriores socios marcó un antes y un después del que reconocieron haber pasado página tras su refundación el año pasado en Granada. Sin embargo, las heridas aún no han cicatrizado.
Adelante, que sí estará en el primer debate electoral de este lunes en TVE, se presenta como una izquierda alternativa al Gobierno que lidera Pedro Sánchez. "Andalucismo a pesar de todo. A pesar de la izquierda que ensució con corrupción el sueño de pan y alegría. A pesar de la izquierda que nos ha querido robar hasta la voz", dice Rodríguez entre aplausos y palmas por bulerías.
El acto de inicio de campaña, que ha contado con la participación de Ángel Cardiel —edil en el pleno municipal de Jerez—, José Ignacio García —número 2 por la provincia de Cádiz y ex diputado en el Parlamento Andaluz— y la propia Teresa Rodríguez ha sido un firme alegato contra la subalternidad de Andalucía y en pos de los servicios públicos. "En esta ciudad sabemos muy bien cómo son las privatizaciones del PP", advierte Cardiel, en referencia a las políticas de Moreno Bonilla en la Junta. "Aquel que tenga el pellizco porque no pueda pedir cita para el pediatra o el especialista, que sepa que Adelante está aquí", dice. García no es menos y hace lo propio con la educación, la sanidad y la precariedad en el ámbito laboral. "Las cosas pueden cambiar. A aquellas personas que no pueden dormir por si este mes acaba el contrato queremos decirles: no estás sola".
El "a pesar" lo inunda todo y la alegría se resiente por la incertidumbre ante una cita electoral que afrontan "sin recursos". "Nos ha costado mucho trabajo llegar hasta aquí pero cuando las cosas cuestan es cuando se valoran. Querían enterrarnos, pero no sabían que éramos semillas. No tenemos dinero, pero tenemos cosas que no se compran: lo que decimos nos lo creemos, es verdad. Moreno Bonilla se ve como campeón y no quería entrar en campaña. Ahora toca remontar", advierte García.
"Que se metan los 50 millones del Plan de Empleo donde les quepa"
Clara y contundente. El mensaje de la formación que lidera Teresa Rodríguez no da lugar a dudas. Adelante, que renunció a presentarse con cualquier fuerza política que no sea "netamente" andaluza y que "hable desde Madrid", ha querido desmarcarse de la algarabía suscitada por unos y otros sobre el Plan de Empleo que el Gobierno de Sánchez ha maquinado para Andalucía.
"El Plan de Empleo es un insulto. Nosotros no pedimos limosna, queremos los fondos de recuperación a pesar de que no hayamos tenido desarrollo industrial. Que se metan los 50 millones del Plan de Empleo donde les quepa. Pedimos respeto", dice Rodríguez, que apuesta por una "voz propia" primero en el Parlamento Andaluz, y luego en Madrid y en Bruselas. "Algunos desmantelan lo que Carlos Cano soñó. Andalucía tiene el mismo derecho que los demás para defender a las siguientes generaciones, igual que catalanes, gallegos, valencianos, vascos o turolenses", dice mientras es alentada a gritos de "Andalucía, soberanía". Tampoco falta la pullita para Olona: "Aunque se disfracen e imiten nuestro acento. No olvidemos a la extrema derecha que se hacía la foto con Le Pen, la misma que hace boicot al campo andaluz".
Ahora Adelante tiene quince días para hacer escuchar su propuesta. El objetivo, más allá de su propia supervivencia con la vuelta de una fuerza andalucista al Parlamento, es echar a Moreno Bonilla de San Telmo. Ahí, inevitablemente, deberá sumar toda la izquierda. Lo pasado, pasado, y pelillos a la mar.