Varios diputados de Ciudadanos se 'cambian de chaqueta' y apoyan públicamente a Moreno Bonilla

Los parlamentarios de la formación naranja toman el mismo camino que los votantes y se marchan en masa al PP; las encuestas señalan que uno de cada diez socialistas optaría por el actual presidente de la Junta

El presidente andaluz, Juan Manuel Moreno, con el consejero de la Presidencia, Elías Bendodo, y el vicepresidente Juan Marín en primer plano.

La caída de Ciudadanos está siendo algo paulatino. Nadie podrá decir que no tuvo oportunidad de contemplarla. Las elecciones andaluzas pueden ser el fin de algo que comenzó en noviembre de 2019 con la repetición electoral de las Generales. Sus 21 parlamentarios en Andalucía dieron la oportunidad a los naranjas de tener un Gobierno de igual a igual con el PP que aguantó el sorpasso de puro milagro.

Sin embargo, desde aquel momento Ciudadanos no ha sido capaz de capitalizar nada de uno de sus principales éxitos. La mayoría de los que han sido persuadidos por el Gobierno de coalición de PP y Cs han elegido a los populares como su opción para el próximo 19 de junio. En el recientemente publicado barómetro del Centro de Estudios Andaluces con motivo de la convocatoria, la formación cuyo candidato es Juan Marín no pasaría de los dos parlamentarios. Eso en el mejor de los casos. Algo que sería una auténtica debacle tras superar los 20 en los pasados comicios.

Aun así, y aunque la pérdida de votos va a ser considerable – los datos señalan que no va a superar la barrera del 4% –, lo más complicado de gestionar por parte de Ciudadanos está siendo el propio partido. La fuga de cargos es considerable y, además, algunos de ellos, no están dudando en mostrar públicamente su apoyo al principal rival electoral que debería tener la formación: Juan Manuel Moreno.

Todos ellos lo han hecho sin mencionar al partido que les otorgó el acta de representantes públicos. El primero de los que se ha pronunciado ha sido Raúl Fernández a través de su cuenta de Twitter. Fernández ha señalado que "nos jugamos el futuro" y que "hay que elegir bien". "Si algo funciona hay que mantenerlo y Juan Manuel Moreno ha sido un gran revulsivo. Ha conseguido sacar a Andalucía de la precaria situación que nos dejaron los socialistas".

Pocos minutos después también se ha manifestado Javier Pareja, "desde el convencimiento de que hago lo mejor por Andalucía, apoyo a Juan Manuel Moreno para que siga siendo el presidente del cambio histórico de nuestra tierra para la próxima legislatura". De la misma forma, la parlamentaria María del Mar Sánchez lanzaba un mensaje más enfocado en las candidaturas, "hombres y mujeres que ya han demostrado su gran capacidad y entrega en la Junta de Andalucía. Son cabezas de lista del PP y el equipo de Juan Manuel Moreno. Ante el panorama electoral, sin duda, es la mejor apuesta para nuestra tierra".

Este cambio de bando sólo es un episodio más de lo que empezó con Teodoro García Egea y el fichaje de Fran Hervías. Hervías desde ese momento se encargó en preparar el aterrizaje de distintos afiliados en Ciudadanos. La salida de Hervías tras la 'guerra' interna en el PP no ha frenado ese goteo. Todo ello contrasta con los pocos parlamentarios de Ciudadanos que repiten en las listas. En la formación tienen esperanza de llegar a los cinco diputados.

Sin mostrar su apoyo explícito al PP, otros cargos de la formación naranja se dieron de baja una vez disuelto el Parlamento de Andalucía: Mónica Moreno, Emiliano Pozuelo, Carlos Hernández White, Mercedes López o Sergio Romero, que fue portavoz durante gran parte de la legislatura. Fran Carrillo también ha abandonado la disciplina. Algunos, como White, a pesar de haber dejado la política, ha mostrado su apoyo a Ciudadanos en las redes sociales de cara a las presentes elecciones.

Las tripas de las encuestas

Aunque el barómetro del Centra ha dejado algunos datos llamativos, como que el PSOE es el partido que más gente considera cercano a sus ideas, lo cierto es que la encuesta más interesante ha sido publicada por El País tras su realización por 40db. En ella, Juan Manuel Moreno, o mejor dicho, el PP andaluz, no sale tan bien parado. Porque lo primero que se concluye es que Moreno ha sido capaz de personalizar el voto. Y así lo ha reflejado en su campaña ya que el peso de las siglas de su partido es insignificante.

En dicho barómetro, además de que se observan bien las distintas sensibilidades y preocupaciones de los diferentes electorales – por ejemplo, al 60% de los votantes de Vox les preocupa la inmigración, pero a sólo el 30% la pobreza y desigualdades –, se establecen los flujos que van a decantar la balanza en estas andaluzas.

El 40% de los andaluces cree que la gestión de la Junta en estos años ha sido buena, mientras que sólo el 23% considera lo mismo del Gobierno central. En la mala gestión los papeles se invierten. Esto ha sido una estrategia de los populares durante la legislatura y la pandemia que parece haber dado sus frutos en la percepción de la gente. Lo bueno ha sido responsabilidad de la Junta y lo malo de Pedro Sánchez.

La clave, además de la gran abstención que se espera, está en que uno de cada cinco votantes del PSOE considera buena o muy buena la gestión de Moreno, lo que lleva a uno de cada diez a cambiar su voto hacia el Partido Popular para los próximos comicios. Juan Espadas apena convence a la mitad del electorado socialista, mientras que Moreno consigue la unanimidad entre el del PP.

Pese a todos los datos que dejan sin esperanza a la izquierda, hay uno que reactiva las posibilidades. La coalición favorita para los electores es la que forman PSOE, Por Andalucía y Adelante Andalucía. Seguramente tenga mucho que ver que para la izquierda es la única combinación posible mientras que los populares aspiran a gobernar en solitario. En cualquier caso, la coalición de izquierdas es preferida a una de PP y Vox.

Los socialistas, sin embargo, tienen al electorado menos convencido de acudir a votar el próximo 19 de junio. En 2018, el PSOE tuvo 400.000 votos menos que en las Generales que se celebraron cinco meses después. En esta ocasión, poco más del 60% de sus votantes asegura que acudirá a votar. Todo ello a pesar de que sigue siendo el partido que despierta mayor simpatía.

En esta línea también encontramos a una izquierda absolutamente desmovilizada en comparación a la derecha. Entre los que votaron a PP y Vox la cifra de indecisos ronda el 3%, sin embargo, en el PSOE, UP (incluye a Adelante) y Más País oscila entre el 14% y el 20%. Entre estos datos también encontramos que la fidelidad del votante del PP y casi absoluta (82%) mientras que Moreno consigue atraer a uno de cada dos votantes de Ciudadanos. El PSOE, por su parte, atrae de los naranjas menos que Por Andalucía. En la izquierda, por su parte, no hay tanta fidelidad aunque quitando el 10% de los votantes del PSOE que optan por votar a Moreno, el trasvase se de votos no es entre bloques.