De alcalde transitorio a líder indiscutible en menos de año y medio
Las encuestas apuntan al empate técnico. Hay encuestas que dan como ganador a Antonio Muñoz, actual alcalde y candidato del PSOE a la reelección, y otras que hablan de la ligerísima ventaja que mantiene José Luis Sanz, alcaldable del PP. “La percepción que tengo en la calle es que voy a ganar las elecciones y voy a seguir gobernando. Pero la motivación extraordinaria no es pensar en mí o en mi partido, que indudablemente también, sino en Sevilla”. Muñoz se ve ganador, y a estas de las alturas de la película esa íntima convicción es mejor que cualquier sondeo.
Nacido en 1959 en La Rinconada, residente en la capital andaluza desde 1990, casado con el escritor Fernando Repiso, este licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de Málaga y MBA por el Instituto Internacional San Telmo (Sevilla), además de Experto en Desarrollo Local por la Organización Internacional del Trabajo y las Naciones Unidas, relevó a Juan Espadas en la Alcaldía de Sevilla en enero de 2022, una vez que el exalcalde asumió el reto de regenerar al PSOE andaluz tras la debacle de tres años antes, cuando el PP desalojó a los socialistas de la Junta tras casi 40 años.
Pese a que en principio parecía que el liderazgo de Muñoz estaría en cuestión, lo cierto es que en apenas año y medio empuñando el bastón de mando nadie ha puesto en duda que debía ser el candidato de los socialistas sevillanos. Sin estridencias, con mucho talante y mano izquierda (e incluso mano derecha, pues ha sacado los presupuestos de 2023 con el apoyo de Ciudadanos), capaz de conectar con la vanguardia y esa llamada Sevilla eterna, el alcaldable del PSOE atiende a lavozdelsur.es antes de un acto público en la Casa de las Sirenas.
“Esta zona (Alameda de Hércules) gusta mucho a quienes vienen a divertirse, pero claro, quienes viven aquí…”. Hablaremos de turistificación, y de otras muchas cosas en algo menos de media hora de conversación. “La gestión del día a día da más espacio que una campaña, pero es verdad que esto tiene fecha de caducidad”, lanza, mientras da un trago de agua. Arremangada su camisa blanca, pantalón chino oscuro y zapatos marrones. Sonrisa amplia.
Como es habitual, es una campaña intensa y con un interés extraordinario en el panorama nacional sobre lo que va a ocurrir en Sevilla, lo cual es lógico. Sevilla, la capital de Andalucía, es la tercera área metropolitana de España. Es la mayor capital gobernada por el PSOE en el Estado. Y también estamos en un momento de punto de inflexión en la ciudad por el conjunto de inversiones públicas y privadas que tiene en este momento Sevilla. Todos estos son ingredientes lo suficientemente atractivos como para que haya un foco nacional para analizar qué está ocurriendo y qué va a suceder después del 28 de mayo.
Tengo que decir que la campaña se está desarrollando, creo, por los cánones habituales. Quizá podríamos decir que yo al menos estoy intentando que hablemos de Sevilla, fundamentalmente. Creo que los electores y los ciudadanos de Sevilla merecen un respeto, en el sentido de no hurtarle el debate sobre los proyectos que cada candidato o candidata tiene para nuestra ciudad. Y mal haríamos las cosas, como pretende el PP, de traer el debate y el ruido de la política nacional a la ciudad de Sevilla; replicarlo aquí. Creo que ya llegarán las elecciones para elegir el Gobierno de España y, por lo tanto, ahora lo que toca es hablar de Sevilla.
La conclusión que saco es que si el candidato del PP tiene que recurrir al terrorismo de ETA y a Bildu para hablar de Sevilla, para hablar de las elecciones en Sevilla, me parece que tiene que ver un poco negra la perspectiva de cara al 28 de mayo. Creo que, sencillamente, no toca hablar de esto; si bien manifesté claramente que rechazaba que pudieran ir en las listas estos perfiles, por así decirlos, pero no entiendo la insistencia por parte del PP de no hablar de Sevilla y sí hablar de cuestiones nacionales.
"Si el candidato del PP tiene que recurrir al terrorismo de ETA para hablar de Sevilla, me parece que ve una perspectiva negra para el 28M"
Claro, es que es el momento de la política más cercana. Es el momento de hablar del día a día de la ciudad. Es el momento de hablar de los proyectos de futuro, de los retos, de los desafíos que tiene Sevilla de cara a los próximos años. Si hablamos de otras cuestiones de carácter nacional, estaríamos secuestrando un debate interesante y faltando el respeto al electorado sevillano. Ya habrá tiempo de hablar de esas cuestiones de carácter nacional. Yo, desde luego, no rechazo, ni reniego, ni me escondo, de los debates nacionales. Solamente que ahora, ahora toca hablar de Sevilla, igual que en Cuenca tocará hablar de Cuenca.
Yo no escondo ni muchísimo menos la marca. Todo el mundo sabe que el candidato del Partido Socialista se llama Antonio Muñoz, y parece lógico y normal que el secretario de los socialistas españoles venga a apoyar al candidato a la Alcaldía de la ciudad mayor de España donde gobierna el PSOE. ¿Qué estaríamos diciendo si no viniera a ningún acto político a apoyarme? Pues la conclusión sería que estoy solo, que no tengo apoyo de Madrid… por lo tanto, estamos intentando darle un carácter extraordinario a un comportamiento político en elecciones que tiene todo el sentido del mundo.
Yo la pregunta que lanzo al electorado, la que me gusta hacer cuando me reúno con los vecinos, con empresarios, con ciudadanos de Sevilla, es: después de ocho años de gobierno del PSOE, ¿Sevilla está mejor o peor?. ¿Y qué nos dicen los indicadores? Hay 24.000 desempleados menos, hay un 9% más de empresas. Se han sucedido noticias que invitan al optimismo del futuro económico de la ciudad, como la ubicación en San Jerónimo de la Agencia Espacial Española; la ubicación también del Centro de Transparencia Algorítmica, el único centro de investigación de las plataformas digitales de Europa va a estar en Sevilla; se ha resuelto el tema de una empresa emblemática con muchísimo empleo detrás en Sevilla, como es Abengoa; nos han declarado por parte de Europa, capital del turismo inteligente…
"Estamos resolviendo el talón de Aquiles de la ciudad de Sevilla, que son su infraestructuras del transporte"
Estamos resolviendo el talón de Aquiles de la ciudad de Sevilla, que son sus infraestructuras de transporte, con el Metro en marcha; el tranvía, en marcha, el Tranvibús, licitándose; la conexión entre Santa Justa y el aeropuerto, redactándose el proyecto… Somos una ciudad que está albergando grandes eventos en el mundo de la cultura y del turismo, como pueden ser los Grammy, los Goya. Por tanto, todos son buenas noticias en torno a Sevilla. Y la conclusión es muy evidente: ¿hay problemas? Claro que sí. ¿Hay asignaturas pendientes? Claro que sí. ¿Hay que superarlas y hay que afrontarlas en los próximos años? Claro que sí. Pero lo que es innegable es que la coyuntura económica, por los datos oficiales de Sevilla en este momento, es mejor que la de hace años. Y yo no me atribuyo todo ese éxito. No soy tan arrogante de atribuirme todos esos éxitos de Sevilla como capital de Andalucía, pero indudablemente algo tendrá que ver, en esas decisiones o en esos hechos que han sucedido en Sevilla, el papel del Ayuntamiento, que siempre está en estas inversiones, algunas veces con un papel más destacado y otras veces menos destacado. La conclusión es evidente, Sevilla está mejor y, si está mejor, ¿qué razón tiene un cambio en la Alcaldía? Un cambio en una ciudad que va como un tiro, en una ciudad dinámica, en una ciudad que aglutina inversión público-privada, significaría parálisis. Y volver a la ciudad en blanco y negro, que es lo que ocurre en Sevilla cuando gobierna el Partido Popular...
Sí. Una vez que acepté la sustitución de Juan Espadas, que le dije sí al anterior alcalde, tenía claro que tenía todo un reto en un año y medio para demostrar que era y que podía ser un buen alcalde de futuro. Tenía que ganar visibilidad, tenía que dar muestras inequívocas de ser un alcalde preocupado por los barrios de la ciudad de Sevilla, y creo que en este corto espacio de tiempo mis señas de identidad están claramente definidas. Y por tanto, siempre me he sentido muy seguro de que iba a tener el respaldo del partido para ser candidato; no tenía sentido un alcalde transitorio.
Bueno, como dice Simeone, partido a partido; y el próximo partido del 28 de mayo estoy seguro de que lo voy a ganar, y que voy a seguir siendo alcalde. Entonces habrá cuatro años por delante que son un reto para mejorar aún más Sevilla, para superar los déficits en materia de transporte, para reducir las desigualdades de unos barrios con respecto a otros, para dotar de más equipamientos de todo tipo a esos barrios… y con ese balance estoy seguro que me podré presentar a las siguientes elecciones para revalidar los buenos resultados que espero tener este 28 de mayo.
Bueno, vamos a ver, yo creo que soy un alcalde transversal en una ciudad como Sevilla, donde a veces caemos en la simplificación de que hay una parte conservadora y una parte moderna. Yo creo que Sevilla es una sociedad mucho más compleja que esa división sin más. Sería un error si pensáramos que todos los sevillanos y todas las sevillanas vinculados a la Semana Santa o a la Feria son personas sociológicamente de derechas. La Semana Santa y la Feria son historia, cultura en nuestra ciudad, y por tanto, no entendería a un alcalde de ningún partido político que no tuviera entendimiento y que no trabajara con el mundo cofrade o con el mundo de la feria.
"Es hora de limitar los pisos turísticos y de que el turista contribuya con la fiscalidad"
Indudablemente, eso es compatible también con hacer una apuesta de una Sevilla contemporánea, de una Sevilla que mira al futuro y que afronta los desafíos de luchar contra el cambio climático o de reducción de desigualdades. Como reflexión general, a la hora de acercarte a esos ámbitos de la sociedad sevillana donde, quizás, no hubiera una relación muy intensa en momentos atrás, creo que la mejor recomendación, y lo que yo intento hacer, es acercarte sin impostura, sin mostrarte como no eres. Creo que la naturalidad, la sinceridad, son cuestiones que la gente agradece. Esta reflexión me puede valer para Sevilla, para Barcelona y para Santiago. La gente agradece que seas tú mismo.
Pues, como mínimo, dos medidas cruciales: limitar las licencias de los pisos turísticos en aquellas zonas donde hay un desequilibrio entre pisos de gente que vive allí, sevillanas y sevillanos, y de la gente que los ocupa ocasionalmente por turismo. Hay zonas donde hay un desequilibrio que acaba produciendo una subida de los precios del alquiler y una expulsión de los residentes. Eso hay que limitarlo. Hemos tenido un crecimiento exponencial de pisos turísticos en Sevilla, como en la mayoría de las ciudades turísticas. Por lo tanto, es la hora de limitar. Y en segundo lugar, aplicar una tasa turística, como tienen otras ciudades europeas. No solamente a los que pernoctan en hoteles, sino también a los que están en pisos turísticos o incluso a los que llegan en cruceros. El turista tiene que contribuir con presupuesto, con la fiscalidad, al bienestar de los sevillanos, a ayudar a rehabilitar patrimonio, a mejoras urbanas, también a promoción turística de larga distancia… Pero tiene que haber una contribución del turista, como ocurre en la mayoría de las ciudades turísticas de Europa, más allá de la riqueza que genera el turista al quedarse en un hotel, hacer compras en un comercio, coger un taxi o ir a un restaurante a comer.
La limitación o la no limitación de las licencias la hace la Junta de Andalucía. Es la Junta de Andalucía la que en un decreto que va a aprobar próximamente tiene que incluirlo. Yo espero, como muchísimos alcaldes, de un signo político y de otro, que que en esas zonas que hay un desequilibrio, que hay una tensión del alquiler, la Junta no otorgue la licencia. El papel de los ayuntamientos es secundario porque quien otorga la licencia de pisos turísticos es la Junta de Andalucía. Y en segundo lugar, la fiscalidad turística, que en el caso de España se aplica en Baleares y en Cataluña, porque hay una ley autonómica que lo permite, el Gobierno andaluz se ha manifestado en contra y, por tanto, la única opción que queda para aplicar esa fiscalidad turística es que el Gobierno de España pueda modificar la Ley de Haciendas Locales e incluir como un tributo local el impuesto turístico. Espero que lo haga.
La relación con el presidente Moreno Bonilla es de lealtad Institucional, es una relación cordial, porque parte de una base, el alcalde de Sevilla, sea quien sea, y el presidente o presidenta de la Junta, sea quien sea, del partido que sea, deben tener entendimiento e intentar llegar a acuerdos, porque si hay acuerdos quien ganan son los ciudadanos. Yo soy un alcalde, lo he demostrado en este año y pico, que reivindico al Gobierno de España, que reivindico al Gobierno de la Junta de Andalucía, y que llego a acuerdos con un gobierno y con otro. Creo que quien gana con reivindicar y alcanzar acuerdos son los ciudadanos y a mí lo que me mueve es el interés general. A mí lo que me mueve es pensar en Sevilla y pensar en sus barrios.
Hasta ahora…
"Haríamos bien en mirar lo que ocurre en el gran área de Sevilla, con independencia de los límites administrativos de los términos municipales"
Bueno, a ver, indudablemente no todo es una balsa de aceite. Y hoy hay un problema muy focalizado en los informes que tienen que venir la Junta de Andalucía ante determinadas inversiones en el centro histórico de la ciudad; llevan un retraso de un año como mínimo. Le estoy hablando de la casa Cernuda; de la inversión en la trasera del Lope de Vega para convertirlo en una gran plaza; de colocar los toldos en la Constitución… Esto no está justificado y por tanto, es un cuello de botella que está frenando la inversión; pero está frenando la inversión no solamente del Ayuntamiento de Sevilla, sino también de cualquier promotor de vivienda, ya que cualquier rehabilitación en el centro histórico está sometida a ese mismo informe. En este momento podemos decir que la Junta de Andalucía y la Comisión de Patrimonio son una rémora a la inversión.
Bueno, yo quiero pensar que son problemas burocráticos y demás. Lo que sí es cierto es que quien preside esa comisión, la que otorga los informes de la Comisión Provincial de Patrimonio, es la delegada de Turismo y Cultura que va en la lista de Sanz y que es su número 2 (Minerva Salas). A partir de ahí… que cada uno saque sus conclusiones.
Sin lugar a dudas, Sevilla hay que pensarla en términos de área metropolitana, de la gran área de Sevilla. Y es bueno que Dos Hermanas crezca, que Alcalá de Guadaíra crezca, que La Rinconada crezca, y Sevilla también está creciendo. En los últimos años hemos otorgado licencia para construir más de 10.000 viviendas y hay en proyección en torno a 25.000 más. Económicamente, la ciudad va muy bien, con los desarrollos industriales en torno a la Agencia Espacial, el Parque Aeronáutico o la zona portuaria, que va a albergar proyectos de energías renovables, y el Parque Científico y Tecnológico, que es el que más factura de España. Por lo tanto, fíjese que en distintos sectores económicos Sevilla no es un desierto, por así decirlo, y sin lugar a duda, a la hora de mirar el mapa, a la hora de analizar la evolución de la economía, del empleo, de la población, haríamos bien en mirar lo que ocurre en el gran área de Sevilla, con independencia de los límites administrativos de los términos municipales, que son muchas veces artificios administrativos.
A la izquierda del PSOE: "Con todo el respeto, me gustaría que fueran más unidos de lo que van"
Con todo el respeto, me gustaría que fueran más unidos de lo que van, porque hay dos grandes grupos, Podemos e Izquierda Unida, en una sola candidatura. Pero también Adelante Andalucía, que va en otra candidatura. Si de mí hubiera dependido esas dos coaliciones hubieran ido juntas, porque creo que el electorado es el mismo, y el programa basta leerlo para comprobar que es prácticamente el mismo; el discurso es el mismo y, por tanto, creo que hubiera venido bien la unión para la izquierda en general, como ha ocurrido en otras ciudades andaluzas.
Es evidente que el panorama político en el Ayuntamiento de Sevilla, si se confirman las encuestas, se va a polarizar entre la extrema derecha y el PP, y los partidos de izquierda. Yo aspiro a gobernar en solitario. Creo que hemos demostrado en estos últimos años, sin tener una mayoría absoluta, que hemos sacado los presupuestos adelante, incluso en un año electoral como en el que nos encontramos; que hemos sacado adelante los grandes proyectos vinculados al urbanismo, a la economía; y podemos decir que ningún proyecto se ha quedado en el cajón por no tener una mayoría suficiente en el pleno. Creo que es una muestra de diálogo permanente, por así decirlo, y de flexibilidad a la hora de llegar a acuerdos. Con esa experiencia de gobierno, y teniendo en cuenta que parto de intentar llegar al máximo resultado posible, creo que es un buen aval para seguir gobernando la ciudad de Sevilla.
"Quiero pensar, sinceramente, que va a haber una alta participación, y un aumento del voto por correo"
Yo veo que hay una motivación extraordinaria en el caso de estas elecciones municipales, porque se trata de elegir a los vecinos y vecinas de tu barrio que van a gobernar el Ayuntamiento de Sevilla; y por tanto, no estaría justificada una participación más baja que cuando se trata de elegir en las elecciones europeas, nacionales o regionales. Yo quiero pensar, sinceramente, que va a haber una alta participación, a pesar del buen tiempo que pueda existir, a pesar de la romería de El Rocío, y me gustaría pensar que esa salida de sevillanos va a verse compensada con un aumento del voto por correo.