El consejero de Presidencia de la Junta, Elías Bendodo, ha asegurado este martes, a preguntas de lavozdelsur.es, que la Junta está estudiando la ampliación de la red de delegaciones territoriales en todas las provincias andaluzas. Las delegaciones territoriales son la cara provincial de cada una de las consejerías. Desde que este verano se planteó por parte de Ciudadanos aumentar el número de consejerías, uno de sus argumentos indicaba que la red provincial estaba falta de personas visibles que pudiesen hacerse cargo de todos los asuntos.
La solución de la Junta pasa ya por ampliar estas delegaciones, no las consejerías, toda vez que el tiempo para una reestructuración del Gobierno ya pasó al acabar el verano y la crisis sanitaria dificulta cualquier cambio, pues sería percibido por la población como un aumento de cargos políticos innecesarios. Un pulso que, hay que recordar, se da por ganado por el PP. Ciudadanos quiso aumentarlas y ganar proporción en el Consejo de Gobierno. El PP dijo que solo ampliaría a su favor o no ampliaría. La última palabra es del presidente andaluz, Juan Manuel Moreno Bonilla. Y el asunto ha quedado zanjado después de que en Ciudadanos se llegara a filtrar a algunos medios que la reestructuración era cuestión de días allá por el mes de julio.
Esta semana, la propuesta de las delegaciones ha llegado a la prensa. Lo contaba Granada Hoy. La ampliación de carteras provinciales era una prioridad. Bendodo, a preguntas de lavozdelsur.es, ha señalado tras el Consejo de Gobierno que "sí, es cierto que lo estudiamos como hacemos a diario la situación para mejorar la vida de los ciudadanos. Las delegaciones provinciales son donde acude el ciudadano, y requieren un mejor servicio. Si se produjera, será a coste cero".
La fórmula para aumentar los cargos políticos sin coste es uno: "Será con funcionarios" de las propias delegaciones territoriales. Si se diera un aumento de cuatro delegados territoriales, supondrán 32 cargos políticos más. Ahora, la Junta debe encontrar a 32 funcionarios -o en todo caso, funcionarios- a los que pagar el mismo sueldo para tener un cargo que no entra dentro de la carrera de servicio público del funcionario, sino que está por encima, porque entra dentro de lo que son puramente cargos políticos. Eso supone más responsabilidad y más dolores de cabeza para un responsable que pasaría a tener relevancia pública y que hablaría en nombre del propio Gobierno andaluz en multitud de foros.
Ahora, quedará en manos de los propios delegados provinciales cuyas carteras se vayan a desdoblar encontrar esos perfiles de empleados públicos que estén dispuestos a ello por el mismo salario, que estén cualificados y que, en líneas generales, compartan la visión del Gobierno andaluz en las materias, al menos, en las que sean competentes.
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