Una mayoría absoluta es una autopista. Casi el total de las cosas que un Gobierno con el respaldo mayoritario de las urnas decida no ejecutar es o será porque ese Gobierno no ha querido hacerlo. En esta situación se encuentra el Partido Popular de Andalucía por primera vez en su historia. Aunque su líder y presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha hablado en multitud de ocasiones del diálogo y la mano tendida, lo cierto es que nada le va a impedir llevar a cabo su programa electoral dentro de las competencias de la comunidad autónoma.
La tauromaquia para muchos sigue siendo la fiesta nacional. En los últimos años, con el auge de los movimientos animalistas, también ha crecido el rechazo a los toros. En el Partido Popular son del primer grupo y, por ello, la Junta de Andalucía ya lo está demostrando con sus hechos. En la anterior legislatura, donde era indispensable el apoyo de Vox, el Gobierno andaluz ya optó por aumentar en sus presupuestos las partidas para el sector. En total, entre subvenciones a fundaciones y asociaciones taurinas la Junta destinó más de 400.000 euros al mundo del toro en sus últimos presupuestos.
Pese a ello, en plena campaña, Vox mostró su descontanto al manifestar tras la votación en un pleno municipal de Algeciras que las medidas del Gobierno de PP y Ciudadanos durante la legislatura no habían sido suficientes. Pese a ello, antes de la pandemia, y con motivo del presupuesto de 2020, estas tres formaciones pactaron el "fomento" de la tauromaquia con cantidades similares a las del año siguiente. Tras los primeros meses de pandemia, los festejos taurinos fueron de los primeros eventos autorizados por la Junta para alberga público.
Actualmente el Partido Popular ya no depende para nada de la ultraderecha, sin embargo, el asunto de los toros sigue sobre la mesa y, de hecho, parece que con más fuerza que en la legislatura recién acabada. La primera medida que tomará Moreno junto a su equipo en el próximo Consejo de Gobierno será la aprobación de un decreto para crear Red de Municipios Taurinos para "blindar y proteger a la Fiesta de los ataques políticos e institucionales que sufre y también de las dificultades que sufre el sector por la crisis derivada por la pandemia", según el consejero de Presidencia, Antonio Sanz.
Además de este decreto, el Gobierno andaluz también pretende crear unos Premios Andalucía de Tauromaquia que tendrá varias categorías para "resaltar cada año las figuras o iniciativas que destaquen por la promoción de la tauromaquia". Estos premios serán una novedad a nivel autonómico, pero no a nivel provincial. La Junta ya puso en marcha unos galardones similares en la provincia de Cádiz durante la pasada legislatura donde, además, no faltó la polémica ya que su primera edición se celebró el 8 de marzo, Día de la Mujer.
Esto será el punto de partida, pero no el punto de llegada porque la intención del Partido Popular es la de crear una ley que regule el sector a lo largo de la legislatura que ya prometió Moreno durante el anterior mandato y sobre lo que se reafirmó en el discurso de investidura. El programa electoral de los populares así lo establece, "para garantizar el mantenimiento y crecimiento de la fiesta nacional mediante la regulación del desarrollo de espectáculos taurinos en cualquier de sus modalidades y ofreciendo tanto a los promotores, los profesionales como al público resortes para fortalecer el sector taurino".
"Es la tauromaquia una de las señas de identidad de Andalucía; está en el ADN de esta tierra desde tiempos inmemoriales. Desde el Partido Popular Andaluz y Juanma Moreno entendemos que la defensa de la tauromaquia es una expresión de libertad, además de un reclamo turístico con una repercusión económica considerable y un factor de protección medioambiental de la dehesa mediterránea. El Partido Popular Andaluz y Juanma Moreno consideramos que la fiesta de los toros debe ser protegida, fomentada y difundida", reza el programa electoral de los populares.
Los toros, en mínimos históricos
Hace unos días se hizo viral la imagen de una corrida de toros en Bilbao con las gradas vacías. Esa corrida se comparaba con años anteriores y se observaba de forma bastante clara que la caída de afluencia ha sido evidente. En Andalucía, esa ruptura tan evidente aún no se ha producido, pero los datos dejan claro que la última década ha sido nefasta para la tauromaquia y la afición de ella no ha parado de descender en la comunidad.
Obviando los años afectados por la pandemia de coronavirus, 2020 y 2021, el último curso donde se puede comparar realmente la actividad taurina con los años anteriores - a esperas de los datos de 2022 - fue el de 2019. Dicho año fue el último de una década de gran decadencia tanto en el número de festejos taurinos celebrados como en el número de espectadores. En esos diez años, el número de festejos que dejó de celebrarse fue de 224, según los datos que facilita el propio Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía. Entre 2019 y 2018, la bajada fue del 10%.
Además, hay que remontarse a 2006 para encontrar una tendencia al alza en este tipo de celebración cuando se llegó al pico del siglo con 1.230. Si nos fijamos en los tipos de festejos, en 2011 se llegaron a celebrar 133 mientras que en 2019 el número de eventos fue de 65, menos de la mitad en menos de una década. En lo que respecta a espectadores, también hay un bajón considerable. Entre 2010 y 2019 las corridas de toros perdieron más de 150.000 espectadores en las plazas. Los festejos en total se acercan a la cifra de los 200.000, según las cifras oficiales.
La ambigüedad del PSOE
El mayor aliado que tiene el Partido Popular para impulsar estas medidas es que en el principal partido de la oposición no hay una postura clara. En el PSOE, y más concretamente en el PSOE-A, coinciden taurinos con antitaurinos. La última medida que afecta a los toros del Gobierno central fue el bono joven de 400 euros y ahí se excluyó a la tauromaquia tras un debate con cierta polémica.
Pese a ello, en 2021 los socialistas se abstuvieron en el Congreso para que las corridas de toros volvieran a Televisión Española. Años antes, en 2016, los socialistas también se abstuvieron en una votación donde se debatía en el Congreso que la tauromaquia siguiera siendo patrimonio cultural y en la que se respaldó que las corridas de toros siguieran recibiendo subvenciones de las administraciones públicas.
En Andalucía concretamente, el último posicionamiento del PSOE sobre este asunto fue a finales de 2019 en una proposición no de ley para la defensa, preservación y reconocimiento de la tauromaquia. En ella, los socialistas votaron a favor junto a Ciudadanos y Partido Popular. Sin el apoyo del PSOE, esta iniciativa no hubiera salido adelante ya que Vox se posicionó en contra debido a que estaban "hartos de declaraciones de intenciones que se quedan en papel mojado". El programa electoral del PSOE para las andaluzas también incluye que "defenderemos, como siempre hemos hecho, nuestras tradiciones que forman parte de nuestro patrimonio cultural: el mundo del toro, del caballo, la caza y la pesca".