El actual alcalde de Cádiz, José María González Kichi, no se presentará a las elecciones municipales del próximo mes de mayo. Con esta decisión, que acaba de anunciar, cumple su promesa de estar solo dos mandatos al frente del Ayuntamiento y deja a la puerta abierta a su incierto sucesor.
"Honestidad, coherencia y el valor de la palabra dada a la gente. Os anuncio que mantengo mi compromiso y no me presentaré a la reelección como alcalde de Cádiz. Y me iré tranquilo porque en mi equipo hay brillantez, capacidad e ilusión para alumbrar un futuro mejor para la ciudad", escribe en sus redes sociales, donde acompaña el texto con un vídeo.
"Siempre he pensado que la política no debería de ser un trabajo, una forma de ganarse la vida, sino un acto de compromiso voluntario. Un acto de amor y generosidad hacia los demás, que tiene obligatoriamente que ser temporal para no dar oportunidad alguna a la vanidad, a la tiranía, a la corrupción", asegura Kichi en el vídeo.
Honestidad, coherencia y el valor de la palabra dada a la gente
— José María González ۞ (@JM_Kichi) November 23, 2022
Os anuncio que mantengo mi compromiso y no me presentaré a la reelección como alcalde de Cádiz
Y me iré tranquilo porque en mi equipo hay brillantez, capacidad e ilusión para alumbrar un futuro mejor para la ciudad pic.twitter.com/qJkEoCIZae
"En estos tiempos estoy convenido que la honestidad y la coherencia, el valor de la palabra dada, son valores imprescindibles, casi revolucionarios, que debo guardar, que debo legar", asegura el alcalde de Cádiz, que defiende la limitación salarial —ha cobrado lo mismo que como profesor, donando el excedente de sueldo a causas sociales— y su decisión de no "cambiar de barrio", uno de los principales puntos de fricción con Pablo Iglesias, antes de salir de Podemos.
"Queremos niños y niñas jugando en la calle y sin tanto móvil, zonas verdes, aire limpio, pero también queremos aparcar el coche en la puerta de casa para descargar la compra. O nos preocupan las personas sin hogar pero no queremos ver la pobreza del mundo en la puerta de casa. Es difícil elegir entre el ecologismo y la comodidad o entre los derechos humanos y la limpieza", asegura Kichi.
Quién sustituirá al regidor como candidato o candidata de Adelante Cádiz en las próximas elecciones municipales es aún una incógnita, aunque desde hace meses hay varios nombres encima de la mesa. Como el de la actual concejal de Cultura, Lola Cazalilla, o el del asesor de Alcaldía y periodista David de la Cruz, que no lo descartaba en una entrevista en lavozdelsur.es: "Al final es una cuestión de militancia, de dónde quieren tus compañeros que estés para que el proyecto siga adelante".
Después de suceder al PP en la Alcaldía de Cádiz, "que ofrecía un modelo de ciudad viejuno y sin aspiraciones", Kichi asegura que han tenido "la oportunidad de abrir las ventanas del Ayuntamiento para que saliera el olor a cerrado, para que entrase aire fresco, luz, colores, todos los colores". "Y el cambio llegó. Llegó el 15M y un relevo generacional que quería aspirar a cambiar el guión de la ciudad de los macetones que no tenía donde esconder su pobreza y su paro. Llegó el cambio porque el PP votó en contra de la carga de trabajo para la Bahía de la mano de la diputada Martínez, que se olvidaba de que su principal trabajo era defender a Cádiz", asegura.
El alcalde prosigue: "Llegó el cambio porque un apunte en una libreta nos contaba que una tal T. Martínez había recibido sobres de dinero de la caja B que el PP había llenado con mordidas y favores a los grandes empresarios de este país, llegó el cambio porque 8 millones al año en publicidad y autobombo, 275 millones de euros de deuda, 126 días de media para pagar a proveedores, eran cifras que pedían a gritos que algo cambiase".
"Era preciso demostrar que la defensa a ultranza de lo público, los derechos de la ciudadanía, la sostenibilidad, incluso la felicidad y la alegría, siendo preceptos irrenunciables de todo proyecto político del siglo XXI, no pueden convertirse en privilegio para unos pocos. Una ciudad no puede avanzar si va dejando en la cuneta a aquellos que tienen más dificultad para avanzar por sí mismos", relata Kichi, quien la rebaja de la deuda municipal, que se pague a proveedores en menos de 30 días o la reducción de 7,5 millones de euros en el "autobombo" respecto a lo que gastaba el PP, "para ser el segundo ayuntamiento de España en inversión social después de Bilbao".
"Pero queda mucho camino aún por recorrer. Son muchos los desafíos a los que, como ciudad, nos tenemos que enfrentar. El empleo, la vivienda, la justicia social, la importancia de lo público, la igualdad de oportunidades, los derechos. Lo queremos todos, no vamos a renunciar a nada. Para conseguirlo ya hay iniciado un camino, un terreno abonado. Y serán mis compañeros y compañeras los encargados de seguir trabajando para hacerlos realidad", asegura el alcalde, que no revela aún quién lo sucederá como candidato a la Alcaldía.
Comentarios