El expresidente de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, ha vuelto a la sede del PSOE de Andalucía tras una década. Lo ha hecho tras conocer la sentencia del Tribunal Constitucional que anula su condena de inhabilitación por el Caso ERE y ante la presencia de la plana mayor del PSOE andaluz: Juan Espadas, secretario general, Manuel Pezzi, presidente de la formación, y Jacinto Viedma, secretario de organización.
En los 45 minutos que ha durado su comparecencia, el expresidente de la Junta no ha dudado en poner en valor la gestión de sus años al frente del Gobierno andaluz, dejando claro que la resolución del Constitucional "pone fin al procedimiento específico y la causa política de los ERE". Chaves ha hecho públicas sus últimas horas, donde reconoce haber hablado con otros procesados como Carmen Martínez Aguayo, Gaspar Zarrías o José Antonio Griñán. "En esas conversaciones hemos concluido que teníamos un sentimiento raro, agridulce y contradictorio", ha afirmado el socialista.
Ahora se abre una etapa nueva en la vida de Chaves a sus 79 años. A pesar de que en 2015 Susana Díaz le obligó a dejar sus cargos y, posteriormente, hizo lo propio en el partido. A pesar de no haber tenido el carnet en la última década, el expresidente ha reconocido haberse sentido socialista durante todo este tiempo, aunque ha lamentado el tiempo perdido para hacer "muchas cosas que tenía en mente". En este tiempo Chaves ha defendido su inocencia y ha presumido de haber salido mucho a la calle sin que ningún ciudadano le dijera un insulto o una descalificación personal. "Hemos aguantado el tirón por la convicción de nuestra inocencia".
Por ello ha abierto la puerta de par en par a volver a la primera línea política ahora que el Constitucional reconoce su "inocencia". No obstante, esta vuelta a la vida pública la ha dejado en manos del actual secretario general, Juan Espadas, al que ha mostrado su apoyo después de las dudas surgidas en el seno de la formación tras los últimos resultados electorales. "Estoy dispuesto a lo que quiera la dirección del partido. Quiero trabajar para el partido en lo que quiera Juan (Espadas) y la dirección del PSOE de Andalucía".
Chaves insiste en la idea que ya pronunció Carmen Martínez Aguayo, de los primeros altos cargos amparados por el Constitucional. "Ni nos han indultado, ni nos han amnistiado. Se ha hecho justicia y nos han dado la razón. Han sido años muy duros y hemos sufrido mucho. Lo que han estado en la cárcel más". Sus compañeros de Ejecutivo no han sido los únicos con los que ha tenido conversaciones el expresidente en las últimas horas. Chaves ha reconocido que el mismo miércoles tuvo una llamada telefónica con Pedro Sánchez, donde el actual presidente del Gobierno le transmitió su felicitación.
"La operación política y mediática más grave que ha habido en España para tumbar a un Gobierno"
En su reaparición pública, Chaves ha sido especialmente duro con el Partido Popular, al que ha acusado de organizar una situación política y mediática con ropaje judicial para echar al PSOE de la Junta de Andalucía. "Buscaban conseguir lo que no habían conseguido con los votos: erosionar al PSOE ante la ciudadanía y descalificar los 30 años de gestión más brillantes que Andalucía ha tenido en muchas décadas", ha proclamado. El expresidente de la Junta ha calificado lo sucedido como "la operación política y mediática más grave que ha habido en España para tumbar a un Gobierno".
Al igual que ha hecho la dirección del partido en las últimas semanas, Chaves ha pedido a los dirigentes del PP "que no se escondan tras la inmunidad parlamentaria. Si acusan de robo que den nombres y apellidos y asuman las consecuencias de su difamación". El PSOE, de momento, ya ha anunciado acciones legales contra Elías Bendodo y Antonio Repullo por mantener que el caso ERE fue un "robo a los andaluces".
En la misma línea, ha pedido a los populares que muestren respeto por las decisiones judiciales. "Los demócratas tenemos que demostrar que somos demócratas. Hay que tener confianza en el sistema y en las instituciones del sistema. Otra cosa sería el fracaso de la política", ha remarcado en varias ocasiones durante una intervención que ha rozado los 40 minutos de duración.
Chaves ha hablado del caso ERE como uno de los motivos por los que el Partido Popular logró hacerse con la presidencia de la Junta de Andalucía. El expresidente ha querido recordar que lo hizo "con el peor resultado de su historia". Ha querido dejar claro que no va a "cuestionar la legitimidad de un Gobierno que accede con los votos de la mayoría", aunque ha insistido en la idea de que "hubo una operación política y mediática que echó por tierra el engranaje del adversario político. “¿Alguien cree que esta situación no influyó en los procesos electorales?", ha cuestionado después.
Juanma Moreno logró el poder gracias a los votos de Ciudadanos y Vox en la pasada legislatura. Sin embargo, cuatro años después logró una mayoría absoluta con la que gobierna plácidamente. Pese a ello, Chaves considera que la sentencia que ampara a él y a sus compañeros es "un punto de inflexión en la política andaluza. Empieza el principio del fin del ciclo de gobierno del PP en Andalucía".
"No hay fraude en la causa política"
La intervención ha estado llena de sentimientos personales, pero también de valoraciones sobre su etapa en el Gobierno y el proceso judicial. "Somos inocentes", ha sido una de las primeras afirmaciones realizadas por Chaves ante la multitud de medios de comunicación que se ha dado cita este jueves en la calle San Vicente de Sevilla. "No hay fraude en la causa política. Hay piezas separadas y lo acataremos. Corregiría algunas cosas, pero estoy muy orgulloso de la gestión del PSOE en 30 años".
Chaves ha evitado calificar lo ocurrido como lawfare, aunque ha dejado entrever que tiene un pensamiento similar. "No lo voy a llamar así, pero tengo mi opinión", ha dicho, para acto seguido afirmar que "hubo interferencias políticas que condicionaron el proceso. Se elaboró la tesis de la pirámide y había direcciones para intentar implicar a la cúpula del PSOE y de la Junta. Se llame politización de la justicia o judicialización de la política".
El dirigente socialista ha afirmado que los jueces que instruyeron el caso, la Audiencia de Sevilla y el Supremo "no vieron o no quisieron ver algo que se aprende en las facultades de derecho". Chaves se ha referido en estos términos a que una ley no puede ser ilegal, la tesis que ha mantenido para defender durante todo este tiempo su inocencia y la de otros altos cargos que fueron condenados. "El TC lo ha desmontado. Los acuerdos de Gobierno que aprobaron los proyectos de ley fueron legales. El TC ha sido muy claro". Para legitimar la decisión del Constitucional, el expresidente también ha mencionado que Inmaculada Montalbán, ponente de las sentencias, fue designada por sorteo y después de que el presidente del TC anterior, con mayoría conservadora, concentrase todos los recursos presentados en dicha ponencia.
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