Dos realidades se han dado cita este miércoles en el Parlamento de Andalucía. Una simple valla las separaba. Mientras en un lado se debatía sobre los Presupuestos de 2024 que se aprobarán este mismo jueves gracias a la mayoría absoluta del Partido Popular, fuera, con bastante más frío, unas 300 personas se manifestaban por los servicios públicos. Las casualidades han querido que la protesta comenzara a la misma hora que se trataba el tema sanitario en el salón de plenos.
Las Marea Blanca y la Marea Verde se han unido contra la situación de la sanidad y la educación pública. Las cifras record que defiende el Gobierno andaluz no llegan a una ciudadanía que sigue viviendo en sus propias carnes el aumento de las listas de espera o la difícil situación que viven los profesores a la hora de dar clases en aulas sin equipar, con un calor asfixiante en verano y con una ratio desproporcionada.
Aunque la asistencia no ha sido masiva, lo cierto es que diferentes colectivos de la provincia de Sevilla (debido a la provincia en la que se sitúa el Parlamento de Andalucía) han estado representados en una protesta que ha durado algo más de una hora y donde, a pesar de la unión inicial, también ha habido momentos de cierta tensión por la presencia de políticos.
Uno de ellos ha sido cuando Juan Espadas, secretario general del PSOE, ha hecho acto de presencia junto a otro grupo de diputados socialistas. Entre fotos y saludos, el que también es portavoz del PSOE en el Senado se ha llevado algunos reproches por la gestión socialista en el pasado. Allí también han estado presentes representantes de Adelante Andalucía o Por Andalucía. No así del Partido Popular o del Gobierno.
La llegada de Espadas ha provocado cierto movimiento y dispersión. En ese momento, los representantes educativos han pedido a todos los presentes que se dieran la vuelta para continuar con la protesta. Mientras tanto, alguno de los asistentes se quejaba de que los medios de comunicación siguieran al líder socialista. "Menos políticos y más sanidad", se escuchaba de fondo.
Si algo caracteriza a estas Mareas es que la media de edad es elevada. Por algún motivo, las personas mayores parecen más conscientes de la necesidad de defender los servicios públicos que los jóvenes. Mientras el paisaje urbano seguía prácticamente inalterado, con coches y autobuses pasando junto a los manifestantes, los asistentes enlazaban cánticos, algunos de ellos de espíritu navideño. "En los centros de salud han entrado los ladrones y a la sanidad privada se han llevado los millones", proclamaba la Marea Blanca.
Uno de los grupos más combativos llegaba procedente de la Sierra Sur de Sevilla. Lugares como Estepa o Pedrera claman por una solución para sus centros de salud. No es la primera vez que esta comarca se desplaza hasta el Parlamento. En septiembre, los nueve alcaldes de estos municipios sevillanos (alguno del PP) ya acudieron junto a sus vecinos para pedir soluciones ante la falta de médicos. Este miércoles, eldiario.es ha publicado que los Presupuestos contienen una reforma para hacer frente a la problemática de la falta de médicos en zonas rurales y obligar a los profesionales a estar dos años en la plaza asignada en estos municipios.
La manifestación conjunta ha tenido lugar después de que ambos colectivos hayan protestado por separado en las calles de diferentes ciudades andaluzas durante varios fines de semana. Los resultados del Informe PISA han reflejado el mal momento del sistema educativo andaluz. No obstante, el Gobierno de Moreno presume de haber reducido de forma considerable la tasa de abandono escolar.
Pese a ello, la comunidad educativa arrastra reivindicaciones que van más allá de PISA y el malestar con la Junta de Andalucía aumenta desde que el Partido Popular rechazara la tramitación de una Iniciativa Legislativa Popular con la que se pretendía bajar la ratio de forma generalizada. A ello hay que sumarle el retraso en la climatización de las aulas. "Aulas sí, saunas no", han vuelto a gritar los manifestantes.
Sin embargo, si hay un talón de aquiles en el Gobierno ese es el sanitario. Vecinos de diferentes municipios de Sevilla han vuelto a dejar claro ante la sede de la soberanía popular andaluza que la atención del Servicio Andaluz de Salud sigue siendo deficiente a pesar de que las cuentas públicas batirán un récord superando los 13.000 millones de euros.