Mientras toda Andalucía se teñía durante muchos años de rojo, en el sureste, la provincia de Almería, era azul. Tradicionalmente ha sido la circunscripción donde mayor control ha tenido el Partido Popular. Todo representado en el hombre que lideró el proyecto durante casi dos décadas, Javier Arenas.
En 2019, en uno de los primeros plenos tras la investidura, Moreno Bonilla anunció que el Consejo de Gobierno se celebraría durante su mandato en todas las provincias andaluzas. Hasta este martes sólo faltaba Almería. El destino ha querido que la reunión del Ejecutivo en la provincia sea pocas semanas después de la vuelta a la palestra la ‘Gürtel andaluza’, la investigación sobre la presunta Caja B del Partido Popular en Almería.
Eso no ha impedido el tono festivo y de celebración de Moreno Bonilla mientras anunciaba una ‘lluvia de millones’ para la provincia más oriental de la comunidad a la vez que hacía balance sobre la legislatura mencionando cada una de las medidas aprobadas por el Gobierno y el impacto que van a tener, en este caso, en Almería.
No era la primera vez que un Gobierno andaluz celebraba su Consejo de Gobierno en la provincia almeriense ya que en 2008 también ocurrió, por entonces se trataba de un Ejecutivo socialista. Pese al entusiasmo, Almería ha sido la última de este recorrido de tres años, un hecho que Moreno Bonilla ha justificado por la restauración de la Alcazaba, sede de la reunión, a la que le faltaba “cariño y mimo” antes de la llegada del PP, según el presidente de la Junta.
Tras presumir de patrimonio ha llegado el turno de enumerar las inversiones realizadas. Desde Centros de Defensa Forestal, hasta la Autovía de Almanzora, pasando por diferentes monumentos y sus restauraciones. Además, el presidente, por la tarde, también ha asistido a poner la primera piedra de un centro educativo, donde se ha referido a una inversión de 137 millones en educación pública de la provincia.
Sin embargo, lo significativo de la comparecencia de Moreno Bonilla han sido las referencias a sus grandes triunfos de la legislatura: las bajadas de impuestos y la Ley del Suelo. Ambas aprobadas con los votos de Vox. El Gobierno andaluz viene repitiendo en los últimos meses, y en la última semana Moreno Bonilla también lo ha mencionado en su twitter, que Andalucía ha dejado de ser “un infierno fiscal” para convertirse en una “autopista para la inversión”.
Aunque el Partido Popular a través de su cuenta nacional criticaba esta semana al Gobierno de España por una tasa de paro de 14,1%, este martes, Moreno Bonilla ha presumido de los datos de Andalucía, pese a ser considerablemente mayores (22,5%) El triunfalismo andaluz viene por una bajada interanual de 18 puntos, una cifra nada desdeñable, aunque la caída nacional del desempleo ha llegado al 20%.
Aun así, el presidente de la Junta ha pedido “no caer en la autocomplacencia” y ha reconocido que “todavía quedan muchos parados”. Esto no le ha impedido sacar pecho por regresar a las cifras prepandémicas y encabezar el número de autónomos. Este último hecho ya se ha convertido en una de las banderas de los populares para presumir de gestión.
Todo tiene un motivo para los miembros del Gobierno, las bajadas de impuestos. El presidente insiste en que estas medidas han aumentado en 850 millones la recaudación, entre otras cosas porque hay “más contribuyentes que salen de la economía irregular”, deslizan desde el Ejecutivo. También señalan que, gracias a esto, la población andaluza ha crecido en 118.000 afiliados y 60.000 habitantes “porque muchos vienen a buscar futuro en una tierra de oportunidades”.
El presidente tampoco ha dejado pasar la oportunidad de presumir de la LISTA, “si hay una provincia a la que la nueva Ley de Ordenación del Territorio le sienta bien es a Almería”, ha expresado Moreno Bonilla. Según el líder del PP, el 90% de los municipios almerienses no tiene una planificación adecuada.
Esta ley provocó críticas por parte de Unidas Podemos, que se quedó sola en la oposición con la abstención del PSOE, por suponer una “desregulación”. Sin embargo, Moreno Bonilla la ha calificado como “revulsivo económico y social”. Hay que recordar que en el año 2020 el Gobierno de PP y Cs ya se vio envuelto en una polémica por la aprobación de la construcción de un hotel en la playa de los Genoveses. Un caso que podía tener similitudes con El Algarrobico.