La vinculación de Juanma Moreno con Barcelona va más allá de lo normal. El presidente de la Junta de Andalucía nació allí, aunque desde muy pequeño vivió y se crió en Málaga. Pese a esta conexión natural, en las últimas semanas la intensidad de la relación se ha intensificado. El motivo es la supresión del impuesto de Patrimonio por parte de Andalucía con el que la Junta pretende atraer a directivos de grandes empresas que pasan largos periodos en la comunidad. Además, antes de finalizar, Moreno ha anunciado que este marte se conocerá el puesto que ocupará Marta Bosquet, la ex de Ciudadanos que fue presidenta del Parlamento de Andalucía en la pasada legislatura. Con ello se finaliza la absorción de los naranjas por parte de los populares.
En realidad, esta obsesión por captar empresas y empresarios nace con el procés. Aquello provocó que muchas corporaciones buscaran acomodarse en otras comunidades, dada la inestabilidad de Cataluña. Moreno, en su campaña para convertir a Andalucía en una "locomotora económica", tiene entre ceja y ceja la región del noreste penisular. Y todo ello a pesar de que el propio presidente de la Junta ha reconocido en más de una ocasión que Andalucía, hasta ahora, consigue 'robar' más empresas a la Comunidad de Madrid, donde gobierna su propio partido, que a Cataluña, donde se presupone una mayor inestabilidad política.
Por ello, Barcelona se ha convertido en sus cuatro años como presidente en uno de sus escenarios favoritos para 'vender' su modelo. De hecho, el propio equipo del presidente señala el acto como un evento en el que "explicar el modelo andaluz" a la burguesía catalana, uno de los ejes empresariales más importantes del país. El presidente de la Junta ha participado en un foro de La Vanguardia, medio de comuniación que forma parte del Grupo Godó, propiedad de la familia Godó.
Hace un mes, con el anunció de la bonificación de Patrimonio, Moreno ya dejó clara sus intenciones con un fragmento de su discurso, "que cada comunidad haga lo que quiera, pero desde aquí le digo a los empresarios catalanes que aquí está su tierra. En Cataluña hay impuesto de Sucesiones y Donaciones, aquí no; en Cataluña hay Patrimonio, aquí no. Y además aquí no nos vamos a independizar nunca porque somos orgullosa parte de España".
A pesar de que desde su entorno le quitan hierro al asunto asegurando que "no se trata de una visita en absoluto agresiva, sino desde el diálogo y la concordia", la estrategia del presidente de la Junta parece clara. Está dispuesto a invertir todo el tiempo que sea necesario para aprovechar las últimas consecuencias provocadas por el proceso de independencia. El título de la conferencia lo dejaba bastante claro: 'Andalucía, un nuevo liderazgo'. El presentador del evento también ha señalado que era "un momento oportuno" para invitar a Moreno después de las polémicas despertadas recientemente a partir de sus decisiones y declaraciones.
El anuncio más importante del presidente de la Junta ha sido sobre la apertura de una delegacion de Andalucía en Cataluña, una idea que, según el líder del PP se lleva "trabajando mucho tiempo". "Para competir hay que está presente en los lugares mas importantes, tenemos delegacion en Madrid y en Bruselas, pero no en Cataluña uno de los centros de negocio mas importantes".
Moreno, que se ha presentado con unas palabras en catalán, ha tomado la palabra para hacer un recorrido histórico sobre el crecimiento poblacional de Cataluña, "una de las tierras más prósperas de Europa", entre 1950 y 1970. De los dos millones que aumentó la población esta comunidad, prácticamente la mitad era andaluza. "Andaluces como mis padres", ha recordado el presidente de la Junta de Andalucía. El presidente de la Junta ha insistido en la importancia de estos andaluces en el desarrollo de Cataluña. "Cataluña es una comunidad hermana".
A partir de aquí han llegado los mensajes políticos. "Andalucía quiere ocupar el espacio que le corresponde", ha anunciado Moreno después de piropear la mentalidad emprendedora catalana para posteriormente lanzar una crítica a las "las divisiones y los enfrentamientos" en una clara referencia al procès.
Sin embargo, Moreno ha 'recogido cable' sobre las palabras en las que llamaba a las empresas catalanas a instalarse en Andalucía. El presidente de la Junta de Andalucía ha afirmado que se trataba de un comentario "irónico" que, además, iba referido a "llamar la atención" a las grandes empresas catalanas que buscaran expandirse. Por ello, sacado pecho por la paz social y la estabilidad política que hay en Andalucía debido a la mayoría absoluta del PP lograda en las últimas elecciones.
Aunque el barón popular ha reivindicado varios postulados del liberalismo comparando dos modelos: el de "la libre iniciativa del ciudadano y la empresa" y el del "intervencionismo que asfixia el desarrollo económico". Sin embargo, poco después ha rectificado afirmando que él no hace demagogia "ni para un lado ni para el otro", por ello, "tiene que haber impuestos para corregir desigualdades y para que la administracion pueda redistribuir riqueza. Pero tienen que ser figuras tributarias que no limiten el desarrollo".
No ha tardado en explicar en Cataluña todo lo que ha repetido en numerosas ocasiones en Andalucía, que si cambio de mentalidad, que si autónomos, que si bajando impuestos se recauda más, que si extranjeros que no se censaban por Patrimonio, que si locomotora económica y un sinfín de frases que la prensa andaluza ya ha reproducido infinidad de veces. "Andalucía ha echado a andar".
No cabe duda de que el acto estaba enfocado a mostrar la comunidad como un paraíso para las empresas catalanas para la inversión. No obstante, en el funambulismo de la moderación que caracteriza al presidente de la Junta de Andalucía no ha faltado su llamamiento al diálogo, la colaboración y la cooperación, "juntos podemos generar desarrollo y prosperidad a nuestros territorios". En este sentido, Moreno ha querido hacer un guiño a todas las comunidades que forman parte de la "periferia" de un país absorbido por el "centralismo". "Podemos aportar una visión desde la periferia enriquecedora. Estoy absolutamente convencido de ello. Por mi parte voy a hacer todos los esfuerzos para que esa hermandad y sintonía sea la más fuerte posible", ha dicho sobre las relaciones con Cataluña.