Susana Díaz ha hablado este lunes sobre la decisión de altos cargos del PSOE en la provincia de Cádiz de pedir que se abra un proceso de primarias para elegir al candidato o candidata a las próximas elecciones andaluzas. Con la sombra de un posible adelanto electoral, varios nombres importantes se manifestaron el domingo. No fueron pocos. Lo pide la alcaldesa de Jerez, Mamen Sánchez; el excandidato en Cádiz capital y delegado de Zona Franca, Fran González; el alcalde de Alcalá de los Gazules, Javier Pizarro; el de Villaluenga, que además es senador, Alfonso Moscoso; el alcalde de San Roque, Juan Carlos Ruiz Boix; y la exalcaldesa de La Línea y diputada nacional Gemma Araújo.
Díaz ha mostrado este lunes su "profundo respeto" por sus compañeros de formación. Pero ha rechazado hablar de los pasos a dar. "Cuando toque el proceso orgánico, iremos al proceso orgánico", ha indicado.
"Cada minuto del día, cada hora a lo largo de la semana, la estamos dedicando a lo que le duele a la gente, a las necesidades y las inquietudes" que tienen. "Mientras que haya empresas que lo pasen mal, familias que pierdan a sus seres queridos y gente que no sabe que se ha contagiado, yo no voy a perder un minuto que no sea en eso", ha agregado Díaz.
Oficialmente, estos cargos no hablan de un candidato concreto, aunque fuentes socialistas llevan semanas dando por hecho que el rival de Díaz será el alcalde de Sevilla, Juan Espadas. La petición de un proceso de primarias no indica necesariamente que fueran a ser apoyos de Espadas, aunque la realidad es que, si se produce un adelanto electoral como en Madrid, a día de hoy la candidata sería Susana Díaz. Solo adelantar el proceso para elegir una nueva candidatura puede evitarlo. Y es un proceso que no implica tampoco la renovación orgánica, pues aunque se abriera el proceso para que Espadas fuera cabeza de cartel, debería así abrirse otro proceso para la renovación de la dirección del PSOE andaluz.
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