El Parlamento andaluz cierra por Navidad. Hasta 2025 no habrá más sesiones. Y lo ha hecho con la aprobación del Presupuesto, la ley más importante porque pone en pie todas las políticas andaluzas hasta el próximo año, y con la ya recuperada tradición del villancico de cierre del año.
Con Juanma Moreno en el centro, escoltado por sus consejeros y apoyos más cercanos, o con el consejero de Presidencia (el jerezano Antonio Sanz, número dos de la Junta, que va sobrado de compás), el Parlamento ha cambiado con una imagen mucho más festiva que la habitual de discursos y reproches. En 2012 dejó de hacerse, pero en 2022, el primer año de Juanma Moreno en mayoría absoluta, y cuando lo peor de la pandemia había pasado, finalmente se recuperó esta tradición.
Este año ha estado más organizado, con algunas letras ya previstas. Jesús Aguirre, desde la Presidencia de la cámara, jaleaba a los diputados una vez concluida la sesión oficialmente para unirse. Lo han hecho los del PP, junto a los miembros del Gobierno andaluz, y los de Vox, además de funcionarios de la cámara y algunos asesores. No han participado los tres grupos de izquierdas, PSOE, Por Andalucía y Adelante. De Los peces en el río a La Marimorena, y hasta con baile. Juanma Moreno ha amagado con aflamencarse levantando los brazos.
El parlamentario de Adelante José Ignacio García mostraba su postura, por qué no han acudido a cantar: "Acaban de aprobar el Presupuesto que recorta en Sanidad y Educación. Y el PP se pone a cantar villancicos en el Parlamento. A mí esta frivolidad me da vergüenza. Los villancicos los canto con mi gente, mi familia y mis compañeras. Seré un bicho raro en la política".
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