Un joven de 19 años, vecino de Écija, necesita ayuda de una tercera persona para ir al baño, secarse las piernas o cortar alimentos duros con un cuchillo. Tampoco es capaz de caminar y presenta torpeza motora en las manos. Este sevillano ha reclamado al Gobierno un millón de euros en concepto de indemnización por las lesiones que le ha dejado la segunda dosis de la vacuna contra el covid.
Tras la inyección, se ha quedado en silla de ruedas y con un grado de discapacidad del 84% reconocido. Según ha informado su abogado Fernando Osuna en ABC, el joven se vacunó el 23 de septiembre de 2021, la primera dosis se la puso 20 días antes. A partir de ese momento, empezó a sufrir alteraciones sensitivas que atrubiyó a los efectos secundarios.
Sin embargo, en diciembre de 2021 empezó a sufrir alteraciones motoras en las piernas y dolor en la espalda, hasta el punto de que le dejó sin movilidad y le resultaba imposible caminar. Estuvo ingresado en Neurología del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla hasta el 5 de enero de 2022. El día 11, según detalla el letrado que lleva su caso, fue diagnosticado de mielitis transversa, trastorno neurológico que daña la médula espinal.
La Delegación Territorial de la Consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad le ha reconocido un grado de discapacidad del 84%. Desde entonces, este joven acude al Centro de Rehabilitación de Daño Cerebral en Sevilla, al que se desplaza en coche tres veces a la semana. Como el SAS no cubre el coste de este tratamiento, lleva más de 6.000 euros abonados, sin contar la gasolina.
Comentarios