Moreno guarda silencio sobre las listas de espera: Catalina García asume la defensa de la gestión

El presidente de la Junta de Andalucía no ha realizado ninguna valoración sobre el tema que protagoniza la actualidad de Andalucía desde el pasado viernes, cuando el Ministerio hizo público los primeros datos

Moreno esta semana en Bruselas.

La publicación de las listas de espera han zarandeado la política andaluza con un tema sensible. El número de andaluces que espera para ser atendido por un especialista o para ser operado ha ocupado gran parte de los titulares de la prensa de Andalucía. Además, los datos han llegado en dos tandas: el viernes los publicó el Gobierno de España y el martes por la noche la Junta de Andalucía. 

Especialmente relevante ha sido la actuación de la Junta de Andalucía ya que hace unas semanas, desde el Gobierno andaluz señalaban que un problema técnico impedía la publicación de estos datos. El problema ya se alargaba durante más de un año. Sin embargo, pocos días después de que el Ministerio hiciera pública las cifras, la Consejería de Salud superó las dificultades mencionadas.

En total, más de un millón de andaluces están esperando para ser atendidos. Esto supone más del 12% de la población. Además, el número de personas que supera el plazo legal establecido para ser operado ha aumentado en un 227%. Las cifras son difícil de defender. Más aún cuando el discurso oficial de la Junta durante todo el año es que se trata del Gobierno que más ha invertido en sanidad de la historia de Andalucía y que más infraestructuras ha abierto. Aun así, los sindicatos trasladan que existe descontento entre el personal sanitario por las condiciones existentes. Y aunque la situación para especialistas y quirófanos es complicada, el meollo sigue estando en la Atención Primaria.

Hace apenas un mes, miles de personas salieron a la calle en Andalucía para protestar por el estado del Servicio Andaluz de Salud. La protesta fue un sábado. El lunes, Juanma Moreno acudió al Hospital Virgen del Rocío para inaugurar dos máquinas de última generación para tratar a pacientes oncológicos. Esta tecnología había sido inaugurada por la ministra de Sanidad y la propia consejera meses antes. En cualquier caso, el acto permitió a Juanma Moreno aparecer con un cartel y un lema: "sanidad pública de Andalucía". Nada es casualidad.

Moreno no es el político más activo en redes sociales, aunque eso no evita que comente cualquier tema de actualidad. Lo hace a menudo con noticias relevantes. Este mismo jueves apenas ha tardado unos minutos en valorar la resolución del Tribunal Constitucional sobre el impuesto a las grandes fortunas.

Sin embargo, en sus perfiles no es posible encontrar una valoración sobre el tema que ha abierto los periódicos en las últimas horas. Tampoco lo hizo entre el viernes y el martes, cuando fue el Ministerio el que publicó las listas de espera. Estos días ha estado en Bruselas, pero ello no ha provocado un apagón informativo en su persona. El mismo miércoles, cuando ya se conocían los datos, hizo declaraciones que duraron ocho minutos. Fueron prácticamente centradas en la amnistía.

La situación ha provocado que varios grupos de la oposición pidan a Juanma Moreno que destituya a Catalina García, la consejera de Salud. Vox por su parte, haciendo referencia a los cinco años de Gobierno del PP afirmaba que en cualquier caso "tendríamos que pedir la dimisión de Moreno". Los populares, mientras tanto, volvían a vetar un debate monográfico sobre salud.

Pero lo cierto es que Catalina García, consejera de Salud, está actuando de escudo ante las críticas. La responsable del SAS está asumiendo todas las explicaciones. Desde el lunes ha sido la encargada de defender ante los medios de comunicación y ante el Parlamento en Comisión la gestión de la sanidad por parte de la Junta de Andalucía.

La mayoría de entrevistas que ha concedido han sido a Canal Sur. De hecho, García habló para el programa Mesa de Análisis tanto el lunes, con los datos nacionales, como el miércoles, con los publicados por la Junta. Repitió que gran parte de la responsabilidad era de los anteriores gobiernos socialistas y que el crecimiento de las listas de espera era un ejemplo de que el sistema funciona.

Las explicaciones pueden parecer mejores o peores, pero son más que las que ha ofrecido el presidente de la Junta a pesar de que la sanidad es la principal competencia de los gobiernos autonómicos y que la preocupación de los andaluces ha crecido sobre la cuestión en las últimas encuestas publicadas por el Centro de Estudios Andaluces. Pese a todo, Moreno no podrá huir del problema mucho más tiempo. El miércoles se enfrentará a la oposición en el Debate del Estado de la Comunidad.