Un bebé de nueve meses ha fallecido en un centro de salud 24 horas de Paracuellos de Jarama (Madrid), en el que no había ningún médico atendiendo a los pacientes. En el recinto sanitario había únicamente un enfermero y un celador en el momento que el pequeño ha perdido la vida tras sufrir una parada cardiorrespiratoria.
El enfermero, al constatar el estado del bebé, comenzó a realizar la reanimación cardiopulmonar y activó el aviso al Summa 112, que se desplazó con una UVI Móvil y una Unidad de Atención Domiciliaria.
Personal sanitario ha asegurado en redes que habiendo tenido un médico no se habría garantizado un resultado diferente a la pérdida del bebé, pero se podrían haber intentado ejecutar más cosas teniendo un equipo sanitario al completo. "Ante una emergencia, dos manos pueden hacer muy poco", ha señalado Mar Rodríguez, componente de la Plataforma SAR y trabajadora de urgencias extrahospitalarias. "En una parada cardiorrespiratoria es necesario que haya mínimo tres personas", ha señalado Rodríguez.
Desde el Gobierno de Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid han manifestado en redes que el pequeño no murió en el centro. En este sentido, han apuntado también que "llegó sin constantes vitales, aparentemente desde hacía horas".
El Ayuntamiento de Paracuellos de Jarama ha lamentado “profundamente” el fallecimiento, trasladando, en nombre de todos los vecinos, las condolencias a la familia del bebé fallecido.