Una mujer a la que estaban atendiendo los servicios sanitarios no pudo salvar la vida tras sufrir un boicot la ambulancia que iba a trasladarla al hospital, a la que pincharon las ruedas y rompieron las lunas.
Cuando los sanitarios se encontraban en casa de la paciente, fue vandalizada la ambulancia, perteneciente a Osakidetza, el Servicio Vasco de Salud, ya que los hechos tienen lugar en Bermeo, en el País Vasco.
La víctima, de 71 años, sufrió un paro cardíaco, y no pudo ser reanimada por los servicios de emergencias debido a la imposibilidad de trasladarla hasta un centro sanitario. Un médico estaba practicándole maniobras de reanimación cardiopulmonar cuando la ambulancia sufrió los destrozos.
La Ertzaintza ya ha abierto una investigación para esclarecer lo ocurrido. Los agentes han comprobado que las dos ambulancias disponibles habían sido inutilizadas. La investigación se produce como consecuencia de los "posibles retrasos" derivados de estos ataques y del fallecimiento de la mujer.
El cuerpo policial quiere "esclarecer las circunstancias" en las que ha tenido lugar este triste suceso. La Policía vasca confiesa que en los últimos días se han causado daños en una treintena de ambulancias.
El saboteo de ambulancias está enmarcado dentro del conflicto laboral que se vive dentro de la empresa que gestiona este servicio. De hecho, desde septiembre se han boicoteado 229 ambulancias, siete de ellas durante la última madrugada, cuando ha fallecido esta mujer de 71 años.