A partir del próximo 1 de mayo, la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Antonio Muñoz Cariñanos de Sevilla, el antiguo Hospital Militar, dejará de funcionar.
El anuncio ha cogido a las organizaciones sindicales por sorpresa. Este mismo lunes, a las 9.30 horas, el Sindicato de Enfermería, Satse, ha convocado una protesta ante "el nuevo recorte de las prestaciones sanitarias" en este centro hospitalario público tras conocerse "el anuncio del cierre sorpresivo" de la UCI.
"Con la excusa de la baja ocupación de la UCI por parte de pacientes con patologías respiratorias, desde la semana pasada se están desmantelando monitores y todo el material de electromedicina de la Unidad, paso previo a su inminente clausura".
Satse considera "preciso" que la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Muñoz Cariñanos se mantenga "abierta, dotada y funcionando para poder garantizar la prestación sanitaria de este centro hospitalario así como la seguridad y la asistencia de los pacientes allí ingresados".
Y es que "se trata de una UCI de última generación, en la que se ha invertido mucho dinero público, que está preparada para atender pacientes críticos ya sean de patologías respiratorias o de cualquier otra, necesaria por tanto por la complejidad y el número de intervenciones que se realizan en los diez quirófanos de este centro hospitalario".
Satse lamenta además que "no es la primera vez que se cierran unidades en el antiguo Hospital Militar pues el pasado verano se clausuró prácticamente en su totalidad, salvo la Unidad de lesionados medulares, paliativo y Salud Mental, dejando un centro infrautilizado en un claro despilfarro de recursos públicos".
El Sindicato de Enfermería recuerda que lleva denunciando desde la puesta en marcha de este centro sanitario hace ya casi tres años que "continúa aún sin dotación estructural de plantilla fiscalizada, siendo cubierto con personal de otros centros y contratos temporales, con la consiguiente rotación continua de la plantilla y la pérdida de capital humano que ello supone, experiencia y aumento de riesgo en la asistencia".
Satse, concluye, "no va a permanecer impasible mientras se infrautilizan e incluso se desmantelan, con nocturnidad y alevosía, servicios e instalaciones sanitarias imprescindibles para la Sanidad Pública en Sevilla en un contexto en el que las listas de espera continúan creciendo de forma alarmante".