La provincia lleva semanas sumando muchos menos curados que positivos: este viernes, 300 casos más y 18 ingresos

La escalada del coronavirus en la provincia de Cádiz se explica en un contexto de incremento a nivel nacional muy sostenido. Andalucía, por desgracia, aguantó el verano, con algunos brotes que acabaron controlándose en Málaga o Almería, que hacen que de hecho en estas provincias apenas haya restricciones. Cádiz fue excepción, pero ya no lo es.

Y las matemáticas son sencillas. En las últimas semanas, con una excepción la del fin de semana pasado, cada día se han incrementado los casos activos. O lo que es lo mismo, la cifra resultante de restar a los casos positivos los curados totales y los fallecidos totales. En apenas diez días han pasado de unos 5.500 a los más de 6.500 actuales.

El coronavirus es una enfermedad de crecimiento exponencial. Es decir, por cada caso que se da, surgen varios más. Y de esos, varios más. No se suman casos, se multiplican, y no es una expresión simplemente retórica, sino la base del problema: Cuantos más casos hay, más casos va a haber si no se toman medidas. El confinamiento perimetral de las localidades de media Andalucía es una de ellas.

Porque la consecuencia de esos incrementos son dos: el aumento de muertes y el aumento de ingresos. En cifras brutas, acutalmente, en la provincia de Cádiz ha habido unos 12.000 positivos desde el inicio de la crisis, de los cuales la mitad están activos. Y de esos 12.000, han pasado por los hospitales más de un millar de pacientes, de los cuales han muerto 279.

Tomando esta cifra como referencia, si en los pasados siete días ha habido 1.847 casos nuevos, significa que una décima parte de ellos serán ingresados (18) y de ellos, entre tres y cuatro morirán. No se cumple, obviamente, cada día, pero sí de media hasta el momento. 

Pero la mortalidad no explica el problema actual. El problema, como bien se sabe, es que el covid es muy contagioso, y para algunas personas, son consecuencias son terribles y no hay tratamiento rápido ni que sea posible en el hogar: las personas que van a UCI lo hacen porque necesitan respiradores. Hay quien la pasa como una gripe, pero hay otra que, de no ser por estancias largas de UCI, puede morir. Si el ritmo de contagio se incrementa, los hospitales se quedan sin camas de ingreso en planta covid (menos grave) o en UCI (los más graves). 

En los pasados siete días ha habido 69 ingresos en la provincia, según los datos de la Junta. De seguir a este ritmo, como ya pasa en Sevilla, la mayor parte de la actividad de los hospitales tendría que centrarse en una sola enfermedad contagiosa, provocando también merma en los servicios sanitarios. Todo esto pasa ya en Jerez, principalmente, donde se habilitan nuevos espacios, con lo que eso conlleva para el resto de pacientes.

Por eso, leer cada día las estadísticas y ver que hay 52 casos más en Jerez, 33 en Algeciras 30 en Cádiz, o que Arcos alcanza una tasa de contagio por 100.000 habitantes a 14 días de casi 800 personas puede ser poco claro. Pero, desgraciadamente, detrás de esas cifras no solo hay gente joven que tiene mayor probabilidad de pasar la enfermedad sin apenas síntomas, sino que en muchos casos son mayores o enfermos crónicos que se juegan la vida. Y que, por lo que sabemos, en algunos casos la perderán.

Hay que entenderlo porque hay localidades de la provincia con una tasa de letalidad (muertes entre positivos) muy bajaa. En San Roque, una muerte de casi 300 casos desde el inicio de la crisis. En Chipiona, de 101, ninguna. Pero con casi los mismos, Alcalá del Valle, de población muy pequeña, ha perdido oficialmente a 14 vecinos, más que Cádiz ciudad, con 12 muertes de entre el millar de positivos. Por un brote muy duro en su residencia.

Dicho esto, en esta ocasión no se muestran las nuevas muertes de las pasadas 24 horas en la tabla, extraída de datos oficiales de la Junta, porque solo se ha producido una, en Jerez. Las matemáticas, por lo que ha ocurrido hasta ahora, indica que mantendrá la media de mortalidad por encima de ese número en días próximos. Por eso, se coloca una columna con las muertes totales producidas diariamente. Esa es la realidad del virus a día de hoy.