El Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado este pasado miércoles la Orden SND/726/2023 por la que se da por finalizada la crisis sanitaria ocasionada por la Covid-19 y que pone fin, más de tres años después, a la obligatoriedad del uso de las mascarillas en centros de salud, hospitales, farmacias y centros sociosanitarios.
La norma entra en vigor tras la reunión del Consejo de Ministros del pasado martes, que acordó la finalización de la situación de crisis iniciada con la pandemia de coronavirus en marzo de 2020 después de que el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias haya considerado que la Covid-19 ha sido controlada.
Por su parte, la Consejería de Salud y Consumo está considerando la posibilidad de mantener el uso obligatorio de mascarillas en determinadas áreas, después de que el Boletín Oficial del Estado (BOE) publicara este pasado miércoles el fin de la obligatoriedad, en lugares como urgencias, áreas hospitalarias con pacientes más vulnerables y residencias de ancianos y personas con discapacidad.
Así lo ha señalado el director general de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica, Jorge del Diego, durante una entrevista en Onda Local de Andalucía, recogida por Europa Press. Del Diego ha afirmado que esta decisión "tiene sentido en ciertas zonas, como las farmacias, pero en cuanto a la eliminación general en otros espacios, como hospitales, centros de atención primaria y residencias, tendremos que estudiar si en Andalucía reforzamos el uso de mascarillas en lugares específicos".
Respecto a si esta medida sería una recomendación u obligación, Del Diego ha mencionado que cada comunidad autónoma "puede tener la competencia plena para imponer la obligatoriedad en ciertos lugares, si así lo considera necesario".
Por lo tanto, "una vez que se ha publicado en el BOE y podemos conocer el texto y su alcance, primero debemos analizar qué implicaciones tiene esta publicación en las normativas existentes en la Junta de Andalucía. Luego, considerando la situación epidemiológica, el nivel de vacunación, de protección y cómo está la situación en hospitales, centros de atención primaria y residencias, decidiremos si reforzamos el uso de mascarillas o incluso establecemos alguna norma que mantenga su obligatoriedad en determinados lugares y para ciertas personas".
Cuando se le preguntó sobre los lugares en los que se podría mantener la obligatoriedad del uso de mascarillas en Andalucía, el director general insistió en que "tendremos que evaluar si tienen sentido más allá de la pandemia, por ejemplo, en urgencias y áreas hospitalarias donde se encuentren los pacientes más vulnerables y de alto riesgo, como las UCI o las zonas de oncohematología, donde las personas tienen un sistema inmunológico más debilitado".
Además, añadió que "también debemos considerar los centros residenciales para personas mayores y discapacitadas, y cómo afecta a los trabajadores y visitantes que puedan tener o no síntomas respiratorios en espacios cerrados, siempre con el objetivo de proteger a los más vulnerables". Destacó que "el hecho de que el uso de mascarillas deje de ser obligatorio no significa que deje de ser efectivo, ya que ha sido una medida muy eficaz para controlar ciertas infecciones respiratorias".
Sobre cuándo se tomará esta decisión, respondió que "lo sabremos pronto". "En los próximos días o semanas, tendremos una decisión y se comunicará", subrayó.
Por último, en cuanto a la situación del Covid-19, explicó que los contagios entre personas mayores de 60 años son "realmente bajos, en torno a 20 casos por cada 100.000 habitantes, lo cual son cifras muy bajas. Esto nos permite afrontar el verano de una manera más tranquila y planificar todas estas medidas de manera adecuada".