El conflicto entre los profesionales de la Atención Primaria y la consejería de Salud de la Junta de Andalucía sigue su curso. El miércoles tuvo lugar la primera jornada de huelga convocada por el Sindicato Médico. Dos días más tarde, la organización mayoritaria de trabajadores ha denunciado situaciones muy graves.
El Sindicato Médico de Sevilla y su homólogo en Córdoba han alertado de que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) "coacciona" a médicos de diversos Distritos de atención primaria de Sevilla y del Distrito Córdoba-Guadalquivir para que "incumplan" el acuerdo de limitación de las agendas al que llegó con el Sindicato Médico Andaluz (SMA) el pasado mes de enero, unas "coacciones" que desde el SAS han asegurado que "son absolutamente falsas".
Dicho acuerdo se basa en una cartera de 35 pacientes máximo por las mañanas y el resto, hasta un total de 25 más por las tardes y con mayor remuneración. Este apcto se logró en enero, un día antes de que los médicos fueran a una huelga indefinida. Sin embargo, la falta de cumplimiento ha provocado que el Sindicato Médico vuelva a las protestas.
Así, el Sindicato Médico de Sevilla (SMS) señala, a través de un comunicado, que mientras los máximos responsables SAS, incluida la propia consejera, Catalina García, "proclaman su compromiso con la mejora de la atención primaria, los gerentes de diversos Distritos de AP de Sevilla reconocen ante los profesionales que el acuerdo de limitación de las agendas será difícil de aplicar por la falta de recursos".
"El SAS ha intentado retrasar de manera indefinida la aplicación del acuerdo de limitación de las agendas al que llegó con nuestra organización, hasta el punto de que nos hemos visto obligados a retomar las movilizaciones para exigir su aplicación y la implantación de otras mejoras", lo que ha llevado al SAS "a poner en marcha una nueva estrategia para incumplir el acuerdo: presionar a los médicos para que renuncien a su aplicación".
De este modo, el SMS explica que en el Distrito Sur de Sevilla se les "ha llegado a pedir que firmen un documento solicitando no acogerse al pacto suscrito entre el SAS y el Sindicato Médico Andaluz", y por email se les ha indicado que "se pueden acoger a seguir con las agendas habituales hasta ahora y que no es obligatorio acogerse a este acuerdo de limitación de agendas, firmando un documento normalizado que se adjunta y que debe ser enviado a Gerencia".
Esta misma semana se celebró entre sindicatos y consejería de Salud una mesa sectorial que no llegó a buen puerto. Los negociadores sindicales han expresado su malestar ante la falta de voluntad en el SAS para llevar a cabo los compromisos acordados.
El SMS recomienda a sus afiliados que "no firmen esta solicitud y que, si fuesen presionados para hacerlo, se pongan en contacto de manera inmediata con su delegado sindical". A su juicio, "constituye una infamia intentar aplicar el acuerdo de limitación de las agendas de manera retorcida e ineficiente, con el fin de achacar al propio Acuerdo los perjuicios que esta maniobra torticera pudiera causar a los pacientes o a los médicos. Esta forma de presión y de engaño es intolerable", ha dicho.
Por su parte, en un comunicado, el Sindicato Médico de Córdoba denuncian que los profesionales de algunos centros de salud "han recibido una presentación de powerpoint a través de sus directores, con el logotipo del Distrito Córdoba-Guadalquivir, finalizando con un 'virgencita que me quede como estoy', que como poco podemos catalogar como poco seria en el contexto profesional en el que nos encontramos". "En cualquier caso tendrían que poner a la Virgen del Desamparo, pues desamparados estamos con directivos como estos", manifiesta.
"La función de los directivos pasa por procurar un marco laboral saludable, no por fastidiar a los profesionales con intereses cuanto menos retorcidos, manifiestan desde Córdoba.
Ambos organizaciones sindicales añaden que la limitación del número de pacientes por agenda "es una reivindicación básica de los médicos de atención primaria desde hace décadas, y se justifica por razones no solo laborales, sino también, fundamentalmente, de calidad asistencial. Inducir a los médicos a que renuncien a esta medida después de que el propio SAS la ratificara en Mesa Sectorial es inadmisible".
No obstante, tanto el SMS como el Sindicato en Córdoba advierten de que "esta estrategia retorcida no es nueva" y añade que "la presión a los médicos a través de formas más o menos sutiles de coacción es usada desde hace décadas por los cargos directivos e intermedios del SAS". "Existen muchas formas de hacerle la vida imposible a un médico poco complaciente con los deseos de su jefe, y los cargos intermedios del SAS las conocen todas" asegura.
De este modo, desde el Sindicato Médico de Sevilla consideran que el SAS firmó un acuerdo de limitación de las agendas que "no pensaba llevar a la práctica y, cuando se ha visto obligado a hacerlo, intenta desactivarlo forzando a los médicos a que renuncien 'voluntariamente' a su aplicación". "Todos los cargos directivos e intermedios responsables de esta maniobra infame, dirigida a boicotear desde dentro la aplicación del acuerdo de limitación de las agendas, deben dimitir", concluye las dos organizaciones.
Desde el SAS, por su parte, afirman que "es absolutamente falso que se esté coaccionando" a los profesionales para que renuncien a la limitación de agendas, al tiempo que defienden que "cumple" con lo acordado y "se han puesto en marcha las medidas oportunas" para hacer posible esa limitación de agendas.
A través de un comunicado indican, igualmente, que tanto los profesionales sanitarios como los propios centros tienen autonomía de gestión y, por tanto, en aquellos casos en los que los profesionales solicitan que se pueda superar ese límite de 35 y 25 pacientes al día "podrán hacerlo según su propia voluntad y organización".