La Fiscalía acusa a un hombre de drogar durante cuatro meses a su mujer para abusar sexualmente de ella. El individuo vivía con la víctima en una vivienda de Torremolinos y estaban casados desde hace ocho años. Allí convivían con dos hijos en común, de ocho y seis años de edad. El fiscal del caso explica que la mujer mantuvo una conversación con su marido a mediados de febrero de 2016, en la que le dijo que no sentía nada por él y que, a partir de ese momento, no iban a mantener más relaciones sexuales.
A partir de ese momento, empezaron los abusos, de forma que el hombre, según el diario Sur, empleaba una jeringuilla para suministrarle vía oral sustancias psicotrópicas a su esposa. El objetivo era que ella perdiera el sentido para poder mantener relaciones, algo que estuvo haciendo durante cuatro meses, al menos, tres veces. La fiscalía detalla que el 29 de abril de 2016 la mujer acudió al centro de salud de la calle San Miguel de Torremolinos sobre las 21.30 horas para contar a los sanitarios la sospecha de lo que había podido ocurrir. Así, inmediatamente fue derivada al Hospital Materno de Málaga y se le tomó una muestra de orina.
Tras su analisis dio positivo en benzodiacepinas, que provoca sueño, inconsciencia e incluso, el coma. La última vez que el hombre le inyectó esta sustancia fue el 13 de mayo de 2016 cuando la víctima, que estaba en el sofá medio dormida, notó que su agresor le cogío la cara para introducirle con una jeringuilla el líquido. En ese momento, le dio un manotazo y le pidió explicaciones. Por su parte, el objeto contenía tetrahidrocannabinol (THC), que es el principio activo que se encuentra en las plantas de marihuana, y Lormetazepam, un ansiolítico benzodiazepínico de acción corta.
La Fiscalía considera que el hombre es responsable de un delito de abusos sexuales con penetración y solicita que sea condenado a ocho años de cárcel. Además, pide que se prohíba al individuo comunicarse con ella durante 10 años y que se indemnice a la mujer con 6.000 euros.