Las capturas de langostinos de Sanlúcar, referente de la lonja de Bonanza, han descendido "muchísimo" en los últimos meses. Concretamente en un tercio, según José Carlos Macías, técnico de la Cofradía de Pescadores de Sanlúcar. Lejos están los números de los 150.000 kilos contabilizados en 2020.
Esto supone perder parte de un producto que es un auténtico atractivo en la zona, algo que va ligado también a la economía local. El pasado verano, el precio del kilo de langostino se disparó, ante el notable descenso de las capturas.
Aunque aún se está estudiando, un estudio que encabezan los investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) e intenta despejar la hipótesis marcada: ¿tiene relación el descenso de capturas con la expansión de una especie invasora como el cangrejo azul?
Las capturas de cangrejo azul están aumentando exponencialmente. COFRADÍA PESCADORES SANLÚCAR
La presencia del cangrejo azul está contrastada desde el año 2017. Macías apunta que "desde entonces, las capturas han ido incrementándose. Lo que ha pasado este año es que en los últimos meses ha descendido las capturas de langostinos" y han saltado todas las alarmas.
"Estamos trabajando con el CSIC para ver si una cosa está relacionada con la otra. En un principio, los investigadores nos dicen que es posible que haya relación, pero ahora mismo se está estudiando y no podemos asegurarlo al 100%", expone el técnico de la Cofradía de Pescadores de Sanlúcar.
La clave está en confirmar o denegar, a través de los contenidos estomacales de los cangrejos, si están comiendo crustáceos. "Por un análisis de isótopos se sabe si el cangrejo está comiendo langostino", resalta.
El depredador que tanto daño está haciendo es un cangrejo americano que comenzó a invadir Europa. En España entró por el delta del Ebro y ha ido bajando. "Los tenemos en la Bahía de Cádiz, en el estuario del Guadalquivir, y están llegando hasta Coria del Río, ya están las arroceras", subraya Macías.
El problema que existe en Sanlúcar, según comenta a lavozdelsur.es José Carlos Macías, es que al ser el estuario del río Guadalquivir una zona protegida, una reserva, no está autorizada la pesca. De esta manera, "mientras el bicho crece y se va expandiendo, no se le puede atacar, porque no puedes echar un trasmallo en la desembocadura. "Estamos creando una reserva de cangrejos azules, tal y como nos dicen los investigadores del CSIC".
La demanda del sector, tal y como apunta el portavoz de la Cofradía de Pescadores de Sanlúcar, es que se autorice la pesca "y se vayan sacando de ahí, del estuario". Para que sea posible, hace falta acometer una modificación legal, para permitir pescar en la reserva, algo que ya se ha hecho en la delta del Ebro. El permiso tendría que darlo la Junta de Andalucía, ya que es la titular de las aguas interiores.
El tema llegó este mes de octubre al pleno de la Diputación provincial de Cádiz. Izquierda Unida presentó un ruego solicitando medidas concretas de la Junta de Andalucía en favor del control del cangrejo azul en el Golfo de Cádiz, una especia invasora muy agresiva y depredadora que se extiende ya hasta seis millas de la costa y se está afincando en el estuario del Guadalquivir, “uno de los más ricos en cuanto a la cría de especies marinas”, según la diputada provincial de IU, Carmen Álvarez.
Así, la portavoz de IU rogó a la presidenta de la Diputación, Irene García, que inste a su vez a la Consejería de Pesca de la Junta de Andalucía para que “informe sobre la incidencia del cangrejo azul en el Golfo de Cádiz y a debatir la implementación de medidas de gestión, como otorgar permisos temporales a barcos para que pesquen todos los cangrejos de esta especie invasora que sea posible y así contribuir a reducir su presencia en la zona”. Asimismo, pidió mediación para que “la Dirección General de Pesca del Gobierno andaluz atienda la solicitud de reunión registrada hace varias semanas por la Cofradía de Pescadores de Sanlúcar, la Cooperativa de Pescadores del Mar de Rota y la Organización de Productores Pesqueros Artesanal de Cádiz” para abordar este importante asunto.
Álvarez apunto que tanto la Cofradía de Pescadores de Sanlúcar de Barrameda, como el sector pesquero de Rota y Chipiona y las flotas pesqueras que operan en el Golfo de Cádiz, “han dado la voz de alarma sobre esta situación y por hechos como la merma de captura de langostinos, una especie que goza de marca de calidad y que este año su captura se ha reducido”.
Entiende la portavoz de IU que “aunque el sector desconoce por el momento si hay una relación directa entre el cangrejo azul que ya está en el estuario y el descenso de las capturas, sin embargo, los científicos y los técnicos dicen que existen posibilidades de que eso esté ocurriendo, por lo que se hace necesario llevar a cabo un control de esta especie”.
Izquierda Unida recuerda que en el estuario del Guadalquivir se han catalogado más de 150 especies, “lo que da muestra de su riqueza medioambiental y su potencial para el sector pesquero, una zona muy importante de cría que ahora se ve amenazada y en la que ya se están resintiendo empresas dedicadas a la acuicultura”.
Jornada colaborativa para analizar la presencia del cangrejo azul
Desde el sector pesquero de la Comarca Noroeste de Cádiz que incluye a los puertos pesqueros de Sanlúcar de Barrameda, Chipiona y Rota, y ante la preocupación que provoca la aparición de una nueva y peligrosa especia invasora, ha planteado la realización de un taller de trabajo colaborativo denominado 'Incidencia del cangrejo azul (Calinectes sapidus) en los recursos pesqueros del estuario del río Guadalquivir y Golfo de Cádiz. Será el 28 de octubre, y participarán el IFAPA, el CSIC y pescadores del delta del Ebro, para contar cómo ha sido allí la experiencia y cómo se ha plantado cara al cangrejo azul, que en el caso del Golfo de Cádiz está acabando con otros tipos de cangrejos.
El objetivo de este taller es por un lado analizar la incidencia que se podría estar dando entre esta especie invasora y los recursos pesqueros del caladero local, y por otro lado, proponer medidas de gestión para que las administraciones con competencias en la materia -la Junta de Andalucía en este caso- puedan establecer las herramientas oportunas a partir de la opinión de los actores clave.
Para ello contará con la participación de las principales instituciones que actualmente desarrollan proyectos en el estuario del río Guadalquivir y que tienen que ver con esta especie invasora, además de otros investigadores de materias vinculadas, los pescadores de los puertos de la zona, además de personal de las administraciones competentes. A partir del desarrollo de este taller, se obtendrán una serie de conclusiones que serán enviadas a las administraciones como apoyo al desarrollo de medidas de gestión eficaces para frenar la expansión y los efectos de esta especie.
El objetivo es plantar cara el cangrejo azul y evitar el jaque mate al langostino de Sanlúcar y a otras especies.
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