La delegada del Gobierno en Andalucía, Sandra García, ha recordado este pasado lunes que, de cara a la festividad de la Semana Santa, se mantiene el dispositivo establecido para controlar el cierre perimetral de la comunidad andaluza. De hecho el blindaje se traduce en un total de 550 controles para vigilar dicho cierre perimetral y la movilidad entre provincias.
En una entrevista en Canal Sur Radio, recogida por Europa Press, García ha señalado que, en cuanto al cierre de la comunidad, Andalucía se coordina con las otras regiones limítrofes para que se cumpla esta limitación. No obstante, ha hecho un llamamiento a la responsabilidad de la ciudadanía porque "no hay un policía detrás de cada persona", toda vez que ha insistido en que los movimientos que se realicen deben estar "totalmente justificados y se debe portar la documentación que así lo justifica".
Tras señalar que el fin de semana ha contado con "las incidencias normales", unas 500 denuncias y en todas las provincias, con algún detenido, ha insistido en que los controles se mantienen y son aleatorios.
Asimismo, ha subrayado la buena coordinación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado con la policía local y la policía autonómica. "Es muy difícil controlar a todo el mundo, la responsabilidad personal es un elemento fundamental".
Preguntada sobre la posibilidad de que lleguen turistas a Andalucía en Semana Santa mientras los andaluces no pueden salir, la delegada del Gobierno ha advertido de que "los que vienen tanto por aeropuertos como puertos, lo hacen con un PCR negativo, un requisito que no ha cambiado", cumpliendo las condiciones de movilidad decididas para el espacio Schengen. "Una vez que llegan a destino, ya tienen que asumir y respetar las normas que hay. Si hay cierre perimetral de las provincias, tienen que respetarlo", ha afirmado.